Julio Díaz, uno de los autores del citado estudio y codirector de la Unidad de Referencia en Cambio Climático, Salud y Medio Ambiente Urbano del Instituto Carlos III, explica que unas 2.400 urgencias hospitalarias anuales en las Islas están motivadas por los problemas de salud que provoca el ozono troposférico. Se trata de un contaminante secundario, es decir que se produce en la atmósfera, principalmente a partir de los precursores emitidos por los coches como es el NO2.
Además, la citada investigación resalta que en las Islas también se atribuyen 636 ingresos anuales relacionados con partículas materiales. Se trata de materiales sólidos que están en el aire y pueden ser de origen natural o antropogénico. En el caso de los primeros, las más habituales son el polvo sahariano y los incendios forestales, aunque también hay contribución marina. Por su parte, los de origen antropogénico en las Islas están generados, principalmente, por los coches; aunque también influyen las obras y las industrias, aunque estas últimas no tienen mucho peso en el Archipiélago.
Por su parte, las olas de frío son las responsables de 104 ingresos al año en las Islas; mientras que a las olas de calor se les achacan unos 40. En total, se trata de más de 3.140 ingresos urgentes anuales al año motivados por la contaminación y las olas de calor o frío. El codirector de la Unidad de Referencia en Cambio Climático, Salud y Medio Ambiente Urbano del Instituto Carlos III precisa que se han contabilizado todos los ingresos, aunque señala que los pacientes más habituales son los crónicos con diversas patologías como cáncer, bronquitis, EPOC o enfermedades cardíacas cuyas enfermedades se ven agravadas en situaciones episódicas de contaminación.
¿A quiénes les afecta más la contaminación?
En este punto, resalta que las personas en las que más impactan la contaminación y las olas de calor o frío son los niños, porque aún no han terminado de desarrollar su sistema autoinmune, así como las mayores. Aunque este estudio no analiza el desenlace de los ingresos, Díaz explica que «la contaminación puede ser el empujón para las personas que están mal y llegar a provocarles la muerte».
La investigación del Instituto Carlos III arroja que en España se producen 62.000 ingresos urgentes al año atribuibles a la contaminación y 5.400 a los extremos térmicos; de estos últimos, 1.200 se asocian a las olas de calor. En este punto, Díaz precisa que Baleares no se encuentra entre las que tienen una peor situación, principalmente porque no tienen tanto tráfico o industrias, como otras grandes comunidades autónomas. Además, el mar también puede tener un efecto positivo en relación a la posible dispersión de contaminantes.
Más de 42 millones al año
Díaz subraya que los efectos nocivos de la contaminación atmosférica y las olas de calor o frío también tienen un coste económico importante para los ciudadanos. En Baleares se gastan unos 42,3 millones de euros al año sólo para atender las urgencias urgentes a corto plazo vinculadas con la contaminación y las temperaturas extremas, a razón de 1.400 euros por urgencia.
4 comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Menorca - Es diari
Y los aviones llegando masivamente, no contaminan … eso no, eso es aire puro
Nuestro modelo económico necesita contaminar. Crecimiento económico, contaminación y pérdida de salud están directamente relacionados, pero lo hemos aceptado como sociedad.
NO lo dudo, PERO los gusanos y polvo amarillo de los pinos también,,el polvo en suspensión de barro también,,podrían talar los pinos o al menos preocuparse de limpiar las bolsas,,,perooooo
¿Y cuantos muertos producen los políticos con sus decisiones y políticas criminales como la agenda 20-30? ejemplo: la gota fría de valencia.