La técnica japonesa para conciliar el sueño y combatir el insomnio

La respiración lunar es un ejercicio derivado de prácticas tradicionales de yoga, diseñado para inducir la calma y facilitar el sueño. Según se detalla en el libro «El método japonés de pequeños pasos para cambiar todos tus hábitos» de la periodista y escritora Sara Harvey, esta técnica se realiza de la siguiente manera.

Acostado boca arriba en la cama, con los ojos cerrados, se debe presionar la fosa nasal derecha con el pulgar derecho. A continuación, se inhala y exhala profundamente por la fosa nasal izquierda durante un período de dos a tres minutos. Si el nivel de estrés es elevado, es recomendable prolongar la práctica por más tiempo.

La base científica de esta técnica radica en la estimulación del sistema nervioso parasimpático, responsable de promover la relajación y reducir la frecuencia cardíaca. Al respirar únicamente por la fosa nasal izquierda, se activa esta parte del sistema nervioso, facilitando un estado de calma propicio para el sueño. La experta señala que, al practicar la respiración lunar, naturalmente, la respiración y el ritmo cardíaco se ralentizarán, las emociones se regularán solas, lo que conduce a una mente despejada y un cuerpo relajado, condiciones ideales para conciliar el sueño.

Además del respaldo de la tradición y la experiencia empírica, estudios científicos recientes avalan la eficacia de esta técnica. Una investigación realizada en 2022 por estudiantes de medicina indicó mejoras significativas en la calidad del sueño de los participantes tras cuatro semanas de practicar la respiración lunar. Estos hallazgos sugieren que incorporar este ejercicio en la rutina nocturna puede ser una alternativa viable para quienes buscan métodos naturales para combatir el insomnio.

Es importante destacar que, aunque la respiración lunar es una técnica sencilla y accesible, no sustituye la consulta con profesionales de la salud en casos de insomnio crónico o severo. Los especialistas pueden proporcionar un diagnóstico preciso y recomendar tratamientos adecuados según las necesidades individuales.