12/07/18 21:40
QUE Ponç Pons acompañara a uno de sus dos nietos a Es Migjorn Gran, donde se celebraba la bendición de coches y otros vehículos en la fiesta de San Cristòfol, patrón de los automóviles y protector de los viajeros. Para que las tradiciones perduren, como la de la bendición de coches, es necesario hacerlas vivir a los niños desde su más tierna infancia. Eso es lo que debió pensar el poeta menorquín.