Balears inicia la temporada alta con una reducción del 6,9 por ciento en las cifras de paro durante el mes de junio. Al mismo tiempo, vuelve a batir otro récord de empleo con 641.635 afiliados a la Seguridad Social, 19.360 cotizantes más que en mayo y 19.189 más que hace un año. La valoración de estos datos motiva interpretaciones discrepantes. Así, CAEB destaca la «fortaleza» de la economía balear y califica la situación de «pleno empleo».
En cambio, UGT expresa su preocupación porque «se normalice» que la calidad de vida «empeore» en Balears y pide que se incluya la «crisis del alquiler» en el debate sobre el modelo turístico del archipiélago. Y CCOO denuncia que «los datos de paro no indican ninguna mejora en la situación de precariedad que viven los trabajadores de las Islas» con «las medias jornadas involuntarias o las faltas de alta en la seguridad social».
Este sindicato pone el acento en los salarios, «que -afirma-, no son suficientes para vivir». Las elevadas cargas de trabajo, el incesante aumento del precio de la vivienda, el coste de la cesta de la compra y la saturación del territorio forman parte del modelo económico de Balears, basado en el turismo, hoy en proceso de revisión. El pacto por la sostenibilidad que impulsa el Govern exige acuerdos para reducir la precariedad laboral, revisar los salarios y garantizar la plena cohesión social de las Islas.
