Aun cuando los responsables del servicio recuerdan que la atención se presta en función de la gravedad de cada caso o patología y no según el orden de llegada al hospital, lo cierto es que en las Urgencias del Mateu Orfila los usuarios acumulan demoras de hasta cinco horas. En 2016 se alcanzó un acuerdo entre la gerencia del IBSalut en Menorca y el sindicato médico Simebal para reorganizar este departamento.
Pero la consulta de atención rápida no está funcionando con la eficacia y agilidad deseables por los problemas internos y de organización que acaban ocasionando estas largas esperas, con las quejas de los pacientes y sus familiares. De los diez pacientes que forman la plantilla, uno ha sido trasladado a atención a la cronicidad, otro al 061, un tercero está en situación de baja laboral, y no todos los facultativos hacen guardias, porque la mitad, al tener más de 55 años, están exentos. El resultado es una gran asimetría para atender la carga de trabajo que genera la unidad de Urgencias.
Ante esta situación, que se acentúa a partir de las 15 horas, es preciso que el IBSalut adopte medidas para garantizar un servicio ágil y eficiente en esta área sensible del Mateu Orfila.
