La patrona surca la bahía

Este año le tocó a la barca «Fornells» el honor de llevar a bordo la imagen de Santa María del Monte Carmelo, más conocida como la Virgen del Carmen.

En la salida de la procesión hubo algunos momentos de intriga pues el motor de la «Fornells» no arrancaba. Con la asistencia de otra barca que cargaba su batería, finalmente arrancó, entre los aplausos del público que estaba en el muelle, y los cuatro costaleros que portaban la figura de la patrona pudieron cargarla en la nave y la comitiva náutica inició así su andadura.

Fornells vive con mucha devoción la festividad de la Virgen del Mar dados sus orígenes marineros. No solo la gente del pueblo se suma a la celebración sino también numerosos veraneantes.

En el puerto reinaba un gran ambiente y la mayoría de las barcas, muchas de ellas engalanadas para la ocasión, que salieron en procesión estaban llenas a reventar de gente pues es tradición arraigada que sus propietarios inviten a los amigos a sumarse a esta navegación portuaria.

Vida cara

La celebración en honor de Nuestra Señora del Carmen, que también es patrona de la Armada, comenzó a las 7 de la tarde con una misa en parroquia de Sant Antoni Abat. El pequeño templo se llenó al completo para la eucaristía y en el exterior eran muchas las personas que también trataban de seguirla o esperaban que terminara.

Miquel Romero, rector de Sant Antoni Abat, tuvo en la misa palabras para los refugiados que fallecen en el mar y para los pescadores. «La vida de las personas del mar es cara», dijo, al tiempo que citó a su paisano Sorolla y su cuadro «¡Aún dicen que el pescado es caro!».

La banda de Es Mercadal, ataviada con camisas naranjas, esperó la salida de la imagen de la Virgen del Carmen y con música se dirigió en procesión humana hasta el muelle donde comenzó la procesión marítima.