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Un total de 13 años y medio de cárcel es la suma de las condenas que solicita el Ministerio Fiscal a cuatro integrantes de una banda de ladrones que se dedicaba a desvalijar viviendas cuando los propietarios no se hallaban en su interior.

El juicio está señalado para este próximo martes y corresponde al asalto que realizaron entre el 14 y 17 de junio del año pasado a un chalé ubicado en la calle Amazonia, de la urbanización de Malbúger, en Maó. La Policía Nacional detuvo a principios de julio a cinco individuos por este asalto aunque uno de ellos ha quedado al margen de la acusación. Los hombres que serán juzgados son dos españoles, un colombiano y un dominicano de entre 21 y 52 años de edad. Los dos extranjeros se hallaban en situación irregular en España cuando fueron detenidos por agentes de la Policía Nacional de Maó y todos tenían antecedentes penales.

Los acusados accedieron al chalé de Malbúger aprovechando que sus dueños estaban de viaje. Lo hicieron saltando el muro perimetral de paret seca. Con una piedra rompieron la ventana del salón y una vez dentro de la casa se hicieron con joyas, bisutería, bolsos, material electrónico y películas, entre otros objetos, con un valor conjunto de algo más de 30.000 euros, según informó la Policía Nacional tras su detención. En el escrito de acusación, no obstante, el fiscal indica que la compañía de seguros ha indemnizado a las víctimas con la cantidad de 21.570 euros por lo que estas han renunciado expresamente a reclamar las acciones civiles que pudieran corresponderles.

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Dos de los cinco detenidos ingresaron en prisión preventiva tras prestar declaración ante el juez. La investigación policial que llevó a su arresto concluyó que los ladrones formaban una banda criminal bien organizada puesto que cada uno de ellos tenía una tarea encomendada. Los había que perpetraban el robo, mientras que otros almacenaban el botín y el resto, en ocasiones, lo ponía a la venta. El modus operandi no respondía al de los delincuentes habituales del municipio sino que actuaban bajo unas directrices más pautadas.

Fue un allegado de los dueños del chalé quien acudió a revisarla para comprobar que todo estuviera en orden. Entonces detectó un fuerte olor a lejía utilizada por los ladrones, erróneamente, para eliminar las huellas. El hombre vio que todo estaba revuelto y una ventana rota por lo que acudió a Comisaría a presentar la denuncia.

Para dos de los acusados el fiscal pide 3 años de prisión, 3 años y medio para otro y 4 años para el restante. A los dos extranjeros les plantea sustituir la privación de libertad por su expulsión del país durante 6 años