Son ya cinco las personas que han perdido la vida desde el pasado mes de enero, entre ellas, dos motoristas y tres conductores de automóvil, todos ellos varones.
Si se establece el margen en los últimos 12 meses la estadística es aún más cruel puesto que otro motorista de 56 años falleció en septiembre de 2023, en la carretera de Maó a Fornells, por lo que son seis los fallecidos en el último año. Hasta ese pasado mes de septiembre, sin embargo, la Isla acumulaba dos años y un mes sin ningún accidente mortal.
Los contabilizados hasta ahora en 2024 ocurrieron el primero, en el mes de abril, en el cruce de Talati de Baix, un hombre de 76 años que se incorporaba a la ‘general’. Los dos siguientes fueron dos motoristas en junio, con apenas unos días de diferencia, el primero de 29 años en la carretera de Sant Climent a Maó, y el segundo, también un hombre de 64 años que circulaba desde Cala Galdana a Ferreries.
El más grave desde 2018
El de este lunes es el más grave de los accidentes ocurridos en Menorca desde diciembre de 2018 cuando falleció un matrimonio en la carretera de Fornells. La mujer murió en el acto pero el hombre lo haría unos días después, en Palma, como consecuencia de las heridas que había sufrido en ese siniestro.
1 comentario
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Debido a la velocidad que alcanzan los coches, considero que los arcenes actuales son demasiado estrechos. Deberían ensancharase a lo largo de toda la carretera, y paralelos al arcen deberían incluir una franja vegetal. Junto a esta, además debería haber un carril adicional para bicicletas y tractores. También sería conveniente iluminar toda la carretera general, especialmente en los tramos más largos, e instalar semáforos en ámbar intermitente. La velocidad máxima en estas áreas debería ser de 90 km/h.