Imagen de archivo de la playa de Cala Mitjana en un mediodía del mes de julio.

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Mientras en Menorca se sigue a la espera de conocer el resultado de los estudios encargados por el Consell para evaluar la necesidad de tomar medidas contra la masificación turística, el primer documento que genera el Pacto por la Sostenibilidad impulsado por el Govern sorprende en su apartado de diagnóstico de la situación señalando a las playas menorquinas de Macarella (Ciutadella) y Cala Mitjana (Ferreries) como los dos únicos ejemplos con nombres y apellidos del problema de la «amplia superación» de los límites de frecuentación de espacios naturales y urbanos del Archipiélago.

Entre las primeras reflexiones de uno de los ejes clave de las llamadas Bases de la Agenda de Transición, el dedicado a «la demanda turística sostenible», el documento expone la situación que viven entornos de alta intensidad turística y especifica que «por ejemplo determinadas playas llegan a superar el 60 por ciento y el 120 por ciento de su capacidad de carga durante la temporada alta, con puntas que llegan a triplicar esos límites en espacios emblemáticos como Cala Mitjana o Macarella».

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El documento, de 362 páginas, presentado como una primera fase en la hoja de ruta hacia la sostenibilidad turística, ahonda en su parte diagnóstica en que «estas dinámicas –las de la saturación de espacios– provocan una disminución de la satisfacción turística y del rendimiento recreativo de las áreas congestionadas, al mismo tiempo que intensifican la presión sobre las infraestructuras viarias y los servicios públicos, lo que hace evidente la necesidad de una gestión estratégica».

Las Bases de la Agenda de Transición, fruto de nueve meses de trabajo, identifican 247 factores de transformación, 59 objetivos estratégicos y 65 objetivos de desarrollo, y marcan el fundamento para la siguiente fase del Pacto por la Sostenibilidad: la enfocada a las medidas, en la que desde el Govern aseguran que «se concretarán a corto, medio y largo plazo». No obstante, también incluye propuestas de acción «concretas» encaminadas a la monitorización de afluencias y la puesta en marcha de mecanismos que las limiten.

El apunte

Estrategias «exitosas» contra la saturación: poner límites de visitantes en algunas zonas

Aunque desde el Govern aseguran que su hoja de ruta hacia la sostenibilidad está solo en fase de diagnosis, el documento bautizado como Bases de la Agenda de Transición» ya apunta algunas «estrategias exitosas» como el establecimiento de límites de visitantes en zonas especialmente vulnerables mediante umbrales máximos «basados en estudios científicos». También «se proponen acciones concretas» como la promoción de lugares menos saturados «invirtiendo en áreas de menos afluencia para diversificar la oferta turística y descongestionar las zonas más concurridas». En el listado de acciones propuestas se vuelve a subrayar la necesidad de llevar a cabo un control de afluencia en zonas sensibles y el uso de tecnologías predictivas que permitan predecir en tiempo real los flujos de personas. Se considera que con estas acciones el archipiélago balear «puede contribuir a la reducción de las presiones ambientales y la preservación de los recursos».

Las claves
  1. Propuestas: desviar el foco y apostar por alternativas

    Entre las propuestas que ya se apuntan en las llamadas Bases de la Agenda de Transición para evitar la saturación de puntos sensibles de las Islas, el documento apunta a la posibilidad de reforzar el atractivo de zonas menos concurridas, mejorando sus infraestructuras y promocionándolas.

  2. Incentivar a los que abren en temporada baja

    En el vasto documento también se hace hincapié en los problemas que genera la alta estacionalidad y entre los planteamientos que se ponen sobre la mesa está una vieja reivindicación de la hostelería y el comercio,    que se pongan en marcha programas de incentivos para los que abren en temporada baja.

  3. ¿Mejorar la conexión entre islas con drones?

    Son muchos los temas que aborda el primer documento tangible del Pacto por la Sostenibilidad. Entre ellos está la mejora de la conectividad entre islas e introduce como una posible estrategia de colaboración público-privada el impulso de la aviación eléctrica mediante drones tripulados para facilitar los movimientos entre las distintas islas de Balears.