Ronda Sur de Ciutadella.

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La  nueva Ronda Sur de Ciutadella, en 2006, el hotel H55 de Sant Tomàs, inaugurado en 2018 con 165 habitaciones, o la sede del Consell Insular de Menorca en la plaza de la Biosfera, de Maó, en 2003, son tres del centenar largo de obras que han ejecutado las empresas de Antonio Gomila Pons, fallecido el domingo en el Hospital de Son Espases, en Palma.

Desde sus inicios a mediados de los años 80, cuando registró la firma Antonio Gomila SA, el constructor mahonés fue acaparando obra pública concurriendo a las licitaciones más importantes de los trabajos que ofertaban las distintas administraciones, lo que le permitió progresar en sus cometidos, y también en la obra privada en toda la Isla.Además ha construido y tiene intereses empresariales en Mallorca donde la empresa matriz cuenta con oficinas en Binissalem. Selva y Mancor de la Vall.

Hotel H55 de Sant Tomàs.

Integró varias uniones temporales de empresas para participar en muchas de las infraestructuras que se han levantado en la Isla en este tiempo, una de ellas la misma Ronda Sur de Ciutadella, junto a Juan Mora y Prinur.

Equipamientos deportivos, culturales y comerciales, como la sala multifuncional de Es Mercadal, el pabellón de Ciutadella o la superficie de Eroski en Sant Lluís, llevan su sello, como también reformas y ampliaciones de calado en establecimientos hoteleros o en la planta de residuos de Milà.

Sede del Consell insular de Menorca.
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Construyó las naves modulares de Ferreries, el colegio Margalida Florit, de Ciutadella, el Centro de Convenciones de Es Mercadal o la fábrica de Coinga, en Alaior.

La nueva terminal de carga de Aena, en el Aeropuerto de Menorca, o la Comisaría de la Policía Local de Ciutadella, forman parte de su extensa relación de trabajos.

Promoción de vivienda pública en la calle Roca i Vinent de Maó.

Realizó decenas de promociones de vivienda pública y privada en varias localidades, entre las más reciente las de la calle Roca i Vinent, de Maó, hace dos años, o bloques de pisos en la Avinguda Vives Llull o la calle Borja Moll,    también de Maó, así como viviendas turísticas en diversas urbanizaciones, que sumarían más de 700.

Su línea de negocio se diversificó con el paso del tiempo prestando servicios de ingeniería urbana, limpieza y suministro de agua, preferentemente en el centro de la Isla.El staff actual de la empresa y su grupo seguirán adelante con el legado que deja tras su fallecimiento.