Las reacciones a la muerte del empresario menorquín Antonio Gomila: «Lo que logró es irrepetible»

Climent Olives: «Fue un gran empresario, su trayectoria habla por sí sola»

Climent Olives, presidente de la Asociación de Constructores de Balears, mostró su tristeza tras conocer ayer el fallecimiento de Antoni Gomila. «Es un golpe muy duro, nadie se lo esperaba». El empresario alaiorense admite que «siento envidia sana de su trayectoria de gran empresario, los hechos lo demuestran y hablan por sí solos». Lo recuerda como «una persona muy activa, muy insistente y nunca se daba por vencido en ninguna situación». Ha sido, añade, «uno de los constructores más importantes de Menorca».

Arturo Sintes: «Tenía mucha visión, era ambicioso y muy trabajador»

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Arturo Sintes, empresario de la construcción, manifestaba su pesar por la inesperada noticia conocida ayer. «Me he quedado de piedra justo cuando iba a llamarle esta mañana para preguntarle cómo se encontraba». Tuvo un trato profesional directo con él «porque me daba a construir todas las piscinas de las obras que hacía; además de mi amigo era un gran cliente». Explica que «mucha gente le tenía envidia por todo lo que había hecho y seguía haciendo en su vida profesional, tenía mucha visión, era ambicioso y muy trabajador».

Isabel Petrus: «Siento profunda admiración, lo que logró es irrepetible»

Isabel Petrus, empresaria del sector inmobiliario, destacaba ayer horas después de conocer el fallecimiento de Antonio Gomila, que se trataba de una pérdida muy triste «porque era joven y le quedaba aún mucho por hacer». Aunque no tuvo un trato profesional prolongado con él, «siento una profunda admiración porque lo que él logró es irrepetible». Destaca, especialmente, «que una persona que empezó desde abajo, sin nadie detrás como muchos de los que somos de aquella generación, haya montado algo como lo que deja».

Lluís Vidal: «Salvó al Sporting de desaparecer, tenía palabra»

Lluís Vidal fue el primer entrenador que tuvo Gomila durante sus cuatro años como presidente del Sporting Mahonés en su única incursión en el mundo deportivo. «Estábamos por entregar las llaves del club al ayuntamiento y desaparecer, y él apareció de repente y lo salvó» con su inyección económica. Vidal subraya que «te miraba a los ojos y tenía palabra, todo lo que dijo que haría cuando llegó, lo hizo». Recuerda que «en dos semanas hicimos el equipo con el presupuesto que me dio y lo clasificamos para el ascenso a 2ª B; lo siento muchísimo».