José A. Pérez, Joan Mir, el obispo Gerard, Bosco Faner, vicario general; y Lorenzo Lafuente. | Josep Bagur Gomila

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«Somos una Diócesis pequeña, con centenares de voluntarios que participan activamente en todas las actividades, con una economía saneada y austera, al administrar con honradez, eficacia y transparencia todos los recursos que gestionamos», afirmó ayer el obispo Gerard Villalonga.

La celebración del Día de la Iglesia Diocesana, este próximo domingo, motiva la cita anual para presentar las cuentas y los resultados de la gestión de la Iglesia local.

El obispo Gerard compareció con el vicario general, Bosco Faner; el ecónomo diocesano, Joan Mir; el director de Cáritas Diocesana, Lorenzo Lafuente; y José Antonio Pérez, que forma parte de Oficina de Transparencia del Obispado.

Según la cuenta de resultados de 2023, que desglosamos en esta información, las aportaciones de los fieles -1,3 millones- representan un tercio de los ingresos; mientras que la asignación tributaria que percibe la Iglesia a través de la campaña del IRPF también otro supone otro tercio.

En el capítulo de gastos, las retribuciones del clero ascienden a 238.149 euros, mientras que las destinadas al personal laico suman 410.803 euros. El apartado con más gastos consiste en la conservación y mantenimiento de los edificios, que suma 1,7 millones.

«Pero -matizó el prelado- lo importante no son las piedras, que deben cuidarse, sino las personas, que son el objetivo y el motivo de nuestra misión evangelizadora y pastoral con la labor social».

Cáritas

La Iglesia de Menorca lleva a cabo su labor social a través de Cáritas Diocesana, que gestiona un patrimonio propio, y Cáritas parroquiales, según explicó su director, Lorenzo Lafuente.

El Obispado aporta cada año 100.000 euros a este brazo social de la Iglesia, que cuenta con 250 voluntarios y treinta personas contratadas en Menorca. Durante el año pasado a través de los distintos programas de Caritas fueron atendidas en la Isla 2.635 personas, de las que 697 participaron en las acciones de orientación laboral y 110 de ellas obtuvieron un puesto de trabajo. Las ayudas para vivienda se incrementaron en un 23 por cien.

Casa de espiritualidad

Uno de los proyectos que impulsa con mayor interés y empeño la Diócesis consiste en la transformación de El Toro en una casa de espiritualidad y también en una hospedería con unos criterios de estancia y alojamiento similares a los del monasterio de Lluc (Mallorca).

Villalonga Hellín destacó el compromiso de abrir las dependencias de El Toro a la sociedad menorquina, con la voluntad de acoger encuentros y celebraciones.

Actividades

En 2023 se celebraron en Menorca 185 bautismos, 225 primeras comuniones, 137 confirmaciones y 66 matrimonios. La Diócesis cuenta con 26 presbíteros, 47 religiosos y religiosas, 4 diáconos permanentes, 104 catequistas, 18 parroquias, 19 monjas de clausura, un seminarista, tres monasterios y cuatro misioneros.   

En el ámbito educativo, funcionan siete centros católicos concertados en la Isla con 2.800 alumnos, 260 profesores que integran el personal docente y 65 trabajadores en estos colegios.

El apunte

La colecta del domingo, para los damnificados de Valencia

Toda la colecta que se obtenga el domingo en Menorca con motivo del Día de la Iglesia Diocesana, se destinará íntegramente a los damnificados por la DANA de Valencia. El obispo Gerard alude a «las brigadas espontáneas de solidaridad de miles de personas y nos hemos sentido identificados con estos voluntarios». Añade «sentimos la sensibilidad que nos impulsa a ayudar a los necesitados y para unirnos a esta corriente de fraternidad, la Diócesis de Menorca entregará a Cáritas de Valencia la colecta del domingo».