Los radares han generado una importante controversia | Josep Bagur Gomila

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La recopilación de datos, mediante los registros municipales, que ha realizado el PSOE de Es Migjorn Gran concluye que en un año de funcionamiento los radares de velocidad instalados en los accesos al pueblo por Sant Tomàs han detectado 30.025 excesos de los límites establecidos que han acarreado las consecuentes sanciones. Los socialistas comparan esta cifra con las 12.482 sanciones que, argumentan, suman los radares de la carretera general en un periodo de tres años. Consideran que son cifras absolutamente anormales y que, al ubicarlos, pesó por parte del equipo de gobierno un claro afán recaudatorio.

Siempre según el PSOE, una de las consecuencias de este alud de sanciones ha sido otro alud, no menor, de alegaciones por parte de los conductores sancionados. Solo entre el 29 de enero y el 9 de junio los socialistas han localizado en los registros municipales 12.407 alegaciones o identificaciones del conductor por parte de los sancionados.

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La magnitud de la cantidad de multas se ve claramente al establecer una media diaria, ya que se trata de 81 sanciones captadas cada jornada. Más de tres cada hora. Recuerda el PSOE que ellos votaron a favor de la instalación de radares en los accesos en 2022, pero que se abstuvieron en el pleno cuando tuvieron el detalle del contrato firmado por el Ayuntamiento con la empresa Alumbrados Viarios SA. Recuerda también que otro problema de todo este caudal de multas ha sido la dificultad para gestionarlas, lo que al principio provocó la contratación de una persona específicamente para esta tarea y luego su externalización.

En este sentido, el PSOE expone que durante un periodo de cuatro meses, de octubre a enero, no se notifica ninguna multa. Luego el proceso se acelera, llegando a notificar más de 6.000 expedientes de sanción en los cinco días laborales de la semana del 19 al 25 de febrero. Además, las notificaciones han disparado la factura de Correos muy por encima de la partida anual presupuestada, ya que de momento constan dos facturas que suman un importe de 108.000 euros. Los socialistas recelan de las recientes retiradas y cambios de ubicación de los radares, y aseguran que pronto se volverán a colocar los dispositivos de la entrada a Sant Tomàs. Acusan al equipo de gobierno de no informar debidamente a la ciudadanía al respecto. Recuerda que hubo un requerimiento de Tráfico relativo a la competencia de los dispositivos e intuye, por coincidencia de fechas, que puede estar detrás del cambio de ubicación.

El apunte

La previsión de ingresos ya se ha duplicado en lo que llevamos de 2024

Los ingresos por las multas de los radares de Es Migjorn Gran han superado ya con creces la previsión que aparecía en los presupuestos de 2024. La estimación inicial era de 285.000 euros y en estos momentos ya suman más de medio millón, lo que motivó una modificación de crédito de las cuentas que pasó por pleno el 13 de agosto. El PSOE ha llevado a cabo, en base a los datos de 30 de mayo, un cálculo del dinero que acaba en las arcas municipales. Expone que de los 409.000 euros ingresados a 30 de mayo, solo un 11 por ciento (unos 47.000) redundan en beneficio de los ciudadanos de Es Migjorn, puesto que el resto va a parar a los gastos derivados de los radares, como por el ejemplo el 59 por ciento que se lleva la empresa Alumbrados Viarios SA. De los 505.000 euros actuales, un 17 por ciento serían para el Consistorio.