De izquierda a derecha: el vicepresidente del Govern, Antoni Costa; el presidente del Consell, Adolfo Vilafranca; y el conseller de Medio Ambiente, Simón Gornés, en la comparecencia de esta mañana. | CAIB

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En los próximos meses, el Govern y el Consell firmarán un convenio para la construcción de una nueva planta de residuos voluminosos tras el incendio de la antigua nave hace ya siete años. De esta forma, el ejecutivo que lidera Marga Prohens financiará la edificación con cinco millones de euros. Se trata de una infraestructura «necesaria» para la Isla, ya que hasta el momento los tratamientos se estaban llevando a cabo en plantas externas privadas, según ha informado el conseller de Medi Ambient, Reserva de Biosfera y Cooperació, Simón Gornés. Además, ocupará la misma ubicación que su predecesora.

Este anuncio se ha hecho en la presentación del otro convenio suscrito entre ambas entidades para inversiones en materia de tratamiento de residuos, por el cual el Govern aporta 6,4 millones de euros en diez anualidades a las arcas del Consell con el fin de cubrir una «deuda histórica» que se remonta al año 2008. De esta forma, el Govern estaría cubriendo el 30 por ciento de las inversiones hechas en materia de residuos por parte del organismo insular.

Ley de Reserva de Biosfera

Después de la rúbrica, la Comisión Mixta se ha reunido para abordar la financiación de la Reserva de la Biosfera, para la que el Govern aporta otros cuatro millones, junto a la consellera de Presidencia y Administraciones Públicas del Govern, Antònia Estarellas, y el conseller del Mar y del Ciclo del Agua, Juan Manuel Lafuente.

«La Comisión se convocará ahora, que es el primer paso. El segundo será aprobar el reglamento de funcionamiento y decidir quién ostentará la presidencia», indicaba el presidente Adolfo Vilafranca, señalando a su vez que también se procedería a la ratificación de una serie de proyectos vinculados a la Ley de Reserva de Biosfera impulsada por su equipo de gobierno.

Entre ellas se encontrarían varias acciones para la mejora de los hábitats de las especies terrestres y marinas o actuaciones para asegurar la conservación del paisaje cultural, «centrado especialmente en las baterías de Favàritx». Al mismo tiempo, se trabajará en la eficiencia de las infraestructuras energéticas y se destinarán recursos a la mejora del agua, marcando algunas líneas para establecimientos turísticos o el autoconsumo, además de «potenciar la marca Reserva de la Biosfera».