El Consistorio recibe luz verde de la Dirección General de Salud Pública del Govern para poder volver a enterrar en el pueblo.

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El Ayuntamiento de Es Migjorn ha recibido la autorización de la Conselleria de Salud para poner en funcionamiento el nuevo módulo de 16 nichos del cementerio municipal, que tuvo que reformar con urgencia al detectarse graves deficiencias que impedían utilizarlos.

La alcaldesa de Es Migjorn, Antònia Camps, ha denunciado que los errores cometidos en las dos últimas ampliaciones promovidas por el anterior equipo de gobierno «limitaban las opciones de entierro en el cementerio» y que «si lamentablemente una persona hubiera faltado en el pueblo, no podríamos haberla enterrado».

El Ayuntamiento pondrá en funcionamiento el nuevo módulo de 16 nichos del cementerio municipal.

Camps califica de «desastre total» esta situación, que obligó al Consistorio a actuar hasta que esta semana ha recibido el informe favorable de la Dirección General de Salud Pública del Govern para poder volver a enterrar en el pueblo.

Las obras, que tuvieron un coste de 10.000 euros, han permitido solucionar las deficiencias de la construcción, entre ellas, que los nichos eran demasiado estrechos, con serias dificultades para que entraran los ataúdes y sin filtros especiales ni el depósito de lixiviados que exige la normativa.

Además de incrementar el número de sepulturas, el proyecto de reforma y ampliación del cementerio prevé habilitar una nueva entrada y agrandar el aparcamiento. Presupuestado en esta primera fase en 324.000 euros, los trabajos están siendo ejecutados por la empresa COnstrucciones Olives SL con un plazo de ejecución de nueve meses que concluye a principios de 2025.