Estas actuaciones serán las primeras obras en la ‘general’ desde que el pasado verano concluyeron los trabajos de mejora a la salida de Alaior. En la imagen, vehículos circulan por la Me-1 en el punto kilométrico 5,6 donde existe el cambio de rasante. | Gemma Andreu

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Ya no se podrá girar a la izquierda para acceder a Talatí de Dalt y, para salir del yacimiento, tanto en dirección a Maó como hacia Alaior, habrá que seguir circulando y hacer el cambio de sentido unos metros más adelante. Así lo prevé el proyecto de reforma del primer tramo de la carretera entre Maó y Alaior que el autor del mismo, el ingeniero Rodrigo del Pozo, entró ayer oficialmente en el Consell.

Esta es la solución con la que se pretende dar respuesta a la inquietud mostrada por conductores y vecinos, que habían alertado reiteradamente de la peligrosidad de este enlace, en el que confluyen los usuarios de la subestación de Repsol y del Club Hípic Maó y los turistas que acuden a visitar el yacimiento prehistórico de Talatí.

El reciente accidente mortal de este pasado marzo lo ha convertido en un punto negro a solventar y en una de las cuatro grandes actuaciones incluidas en la propuesta.

El proyecto se inicia en la rotonda del aeropuerto, ahora en un lateral de la vía, que se centrará para ser más segura y funcional. Y concluye en el kilómetro 5'6, poco antes de Rafal Rubí, donde se rebajará la altura de la carretera hasta un máximo de tres metros. Este desmonte pretende eliminar un peligroso cambio de rasante e incrementar con ello la seguridad de la vía. La máxima que, por indicación del Consell insular, ha seguido el proyecto.

Las obras, que el Consell quiere empezar a ejecutar a principios de 2025, tienen un presupuesto estimado de 6 millones de euros. Serán las primeras que se ejecuten en la general desde que el verano pasado concluyeron los trabajos de mejora en la salida de Alaior.

El conseller de Movilidad, Juan Manuel Delgado, ha destacado que las cuatro actuaciones incluidas en el proyecto «supondrán una mejora notable de la seguridad, al propiciar la eliminación de los giros a la izquierda, la ampliación de los arcenes, la supresión de los cambios de rasante y la mejora de los accesos».

El proyecto será supervisado ahora por el departamento de Carreteras antes de ser reenviado a las distintas administraciones competentes que deben informarlo. La previsión es que este trámite y la posterior licitación de las obras se prolonguen todavía durante todo lo que resta de año.

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Para más adelante quedará la reforma del tramo de Rafal Rubí, donde anteriormente se preveía una intersección a doble nivel y que está afectado por las navetas prehistóricas del yacimiento.

El Consell ha encargado el informe de impacto ambiental previo al expresidente del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (Icomos) de España, Jordi Tresserras, el mismo que evaluó la candidatura de la Menorca Talayótica. Tresseras deberá justificar en su estudio que el enlace a doble nivel a la altura del cruce de Rafal Rubí puede ser compatible con el entorno de las navetas, incluidas en la declaración de Menorca Patrimonio Mundial de la Unesco.

Esta segunda obra, aún sin plazo definido, cuenta con una previsión presupuestaria de 4'1 millones.

Financiación

El Consell, que ya lleva invertidos más de 50 millones en diez años en las obras de la general, ha pedido otros 66 millones al Ministerio de Transportes para poder finalizar todas las mejoras previstas. A la espera del dinero de Madrid, se servirá del remanente de tesorería de 46'3 millones con el que ha cerrado la liquidación del último ejercicio para poder financiar esta y otras obras.

Las cuatro actuaciones principales

Km 3'1: Una rotonda de acceso al aeropuerto más centrada y más segura

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La primera actuación se llevará a cabo en el punto kilométrico 3'1, donde se halla la rotonda de acceso al Aeropuerto. La propuesta presentada por el ingeniero Rodrigo del Pozo prevé «centrar» más la rotonda y «maximizarla» con el objeto de «mejorar así su seguridad, capacidad y funcionalidad».    Desde la rotonda y hasta el cruce de Talatí, una mediana central con cebreado impedirá los giros a la izquierda.

Cruce de Talatí: prohibido el giro a la izquierda y el cambio de sentido

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En la solución al cruce de Talatí, el cebreado central impedirá expresamente el giro a la izquierda para acceder al yacimiento.De esta forma, quienes quieran entrar en Talatí procedentes de Maó deberán circular hasta el punto kilométrico 4'8 para efectuar el cambio de sentido. Y, a su vez, para salir de Talatí en dirección a Alaior cabrá cambiar el sentido de circulación en la rotonda del aeropuerto.

Km 4'8: Cambio de sentido obligado para quien desee volver a Maó

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Este punto 4'8 de la carretera es el indicado para plantear un cambio de sentido, en forma de almendra, de los coches que, circulando en dirección a Alaior, deseen redirigirse a Maó. Se trata de una solución recurrente que ya se ha empleado para regular las entradas y salidas de otras intersecciones en los distintos tramos de la carretera general, como el cruce de Ets Alocs entre Ciutadella y Ferreries.

Km 5'6: Rebaja tres metros la carretera para eliminar un cambio de rasante

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El cambio de rasante que se encuentra poco antes de llegar a la intersección con el yacimiento de Rafal Rubi será eliminado mediante el desmonte de la estructura de la carretera, que en este punto se rebajará un máximo de tres metros. El conseller destaca que se trata de un tramo complicado para la seguridad vial que, según la propuesta del autor del proyecto, exige la adopción de esta medida.