Un vehículo del servicio de limpieza, junto a la orilla de la playa de Binibèquer. | SOS POSIDÒNIA

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A la retirada o no retirada de la posidonia de las playas tradicionalmente le ha acompañado un cierto grado de controversia y crítica desde distintos flancos. Por tardía o por temprana, por insuficiente o por excesiva, o incluso por irregular. Este año no ha sido la excepción.

La campaña empezó hace pocos días en las playas urbanas, como es habitual. Ayer por la mañana el colectivo SOS Posidònia divulgó en las redes sociales lo que entendía como una irregularidad en los trabajos que se desarrollan en el arenal de Binibèquer. La denuncia, acompañada de imágenes de maquinaria trabajando en la orilla, era por la posible retirada de posidonia sumergida o húmeda.

El director insular de Proyectos Sostenibles, Isaac Olives, aseguraba pocas horas después que no había irregularidad alguna. La posidonia en cuestión, según Olives, se encontraba a cinco metros del mar, pero se había sumergido en el agua para retirar la abundante arena que tenía. «La estaban limpiando para recuperar la arena», explicó, «es todo lo contrario de lo que dicen».

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Isaac Olives asegura que la empresa encargada de la retirada de la posidonia cumple al cien por cien los criterios ambientales, «somos los primeros interesados en que las cosas se hagan bien y nuestros parámetros son más estrictos de lo que establece el decreto balear de protección de la posidonia».

El director insular lamenta que estas denuncias públicas se produzcan sin que estos colectivos se informen previamente de los trabajos que se están realizando, «nos hacen perder el tiempo en comprobaciones que no llevan a nada». Considera que estas críticas deberían estar más fundamentadas, no basarse en unas simples fotografías.

Ya el año pasado SOS Posidònia denunció una actuación irregular en Tirant por la extracción de posidonia húmeda o sumergida. Esto motivó la apertura de un expediente al Consell por parte del Govern y, por otro lado, que el Consell solicitara una aclaración de la norma al Govern. Isaac Olives informa que el expediente todavía está abierto, después de numerosos papeleos, pero que probablemente se resolverá sin demasiadas consecuencias. Sobre la consulta, comenta que en todo momento el Ejecutivo autonómico ha avalado el proceder del servicio insular de limpieza, «la posidonia sumergida es la que no podemos tocar, y de este modo lo hacemos».