El Govern estima que la recuperación podría iniciarse a partir de marzo de 2021. | Josep Bagur Gomila

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Una vez los fijos discontinuos han salido de los ERTE para acogerse a una prestación extraordinaria hasta al 31 de enero y se han implantado los nuevos tipos de expedientes de regulación, la cifra de personas afectadas por esta fórmula de protección laboral se ha estabilizado en torno a 1.600 en Menorca. Mientras tanto, en noviembre el número de desempleados creció tanto en términos mensuales como interanuales, hasta situarse en 6.422.

Según explicaron ayer el conseller Iago Negueruela y el director general Llorenç Pou, más de la mitad de los actuales 30.962 trabajadores en ERTE de Balears han entrado en esta situación mediante los nuevos tipos de expediente, aprobados en octubre. En concreto, 17.016. Los ERTE por causas productivas afectan a 4.437 personas y los de fuerza mayor, a 9.499.

En Menorca, en octubre se bajó de los alrededor de 4.000 a 1.648 trabajadores incluidos en un ERTE, cifra que se ha reducido tan solo en 47 personas durante noviembre. Esta estabilización, junto con la resistencia de las cifras de afiliados a la Seguridad Social (en Menorca el descenso interanual fue del 3,1 por ciento en octubre), llevan al conseller Negueruela a afirmar que se está demostrando la eficacia de las medidas de protección laboral adoptadas con motivo de la pandemia.

El paro, en parte como vaso comunicante del descenso de afectados por ERTE, sube en noviembre hasta los 6.422 desempleados. Respecto a octubre, en el caso de Menorca se produce un aumento del 4,3 por ciento (266 personas), mientras que en el acumulado de los últimos doce meses el incremento se sitúa en las 1.569 personas, es decir, un 32,3 por ciento más. El conseller Negueruela señaló en la rueda de prensa de ayer que las cifras de desempleo en Balears se aproximan a las de 2014, en plena salida de la crisis de 2008, aunque para la Isla una comparativa más fiel es más cercana: 2015, con 6.301 desempleados.

El número de demandantes de empleo crece de una forma todavía más holgada: el 67 por ciento en las Islas y el 43 por ciento en Menorca, para situarse en las 15.612 personas en pleno invierno de la pandemia.