La barca se retiró horas después de su hallazgo | Josep Bagur Gomila

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Las tareas de búsqueda que durante las últimas horas han llevado a cabo en la Isla efectivos de la Guardia Civil y de la Policía Local de Sant Lluís se han saldado sin resultado efectivo. No se habían producido a última hora de la tarde detenciones en relación a la aparición de una patera, con motor fueraborda y cargada de combustible, entre las rocas de la costa de Binissafúller.

Por este motivo, la hipótesis que va ganando más fuerza entre las fuerzas encargadas del caso, a medida que pasan las horas, es que la embarcación llegó al litoral menorquín a la deriva, sin pasajeros a bordo, procedente de Mallorca, donde durante los últimos días sí se está produciendo una entrada importante de personas procedentes de la costa africana a través de este sistema. En un solo día, el pasado viernes, alcanzaron la costa de la isla vecina siete barcas con 92 personas a bordo.

Mientras tanto, la embarcación fue retirada por efectivos de la brigada municipal del Ayuntamiento de Sant Lluís, que emplearon para ello una grúa, pocas horas después de su hallazgo, a primera hora del martes. Desde entonces permanece guardada, a buen recaudo, a la espera de que los responsables de la investigación decidan qué se debe hacer con ella.

La patera de Binissafúller es la primera de la que se tiene conocimiento en la Isla en el curso de 2020, y la cuarta en los últimos dos años. Esta en concreto tenía capacidad para una docena de personas, y su nombre corresponde a un pueblo argelino.