La existencia de volúmenes edificados sin licencia conlleva que el incremento previsto deba ser menor, según interpreta el Consistorio

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El Ayuntamiento de Alaior aseguró este viernes que no está de brazos cruzados en relación al proyecto de reforma de los dos hoteles de Meliá Hotels en Son Bou durante la vigencia de la suspensión cautelar de licencias en la parcela afectada, que la cadena ha llevado a los tribunales. Desde el Consistorio aseguran estar ahora a la espera de que la promotora adapte la solicitud de permiso de obras «a los parámetros urbanísticos contemplados en la licencia definitiva concedida en 1971». Desde Meliá, por su parte, defienden la legalidad del proyecto presentado a mediados de 2017, que intentará hacer valer antes de continuar con la vía judicial.

A pesar de que ninguna de las dos partes quiere entrar en más detalles sobre un proceso complejo y de difícil acuerdo, la adaptación de la licencia supondría que los volúmenes previstos en el proyecto (con un aumento máximo posible del 20 por ciento sobre lo existente) deberán tener como punto de partida la parte de los edificios actuales que legalmente está reconocida en la licencia de 1971, no la construida.

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