El actual pantalán, el más próximo al Cós Nou, se prolonga hasta prácticamente el puente de la Colársega, para alcanzar los 140 metros de longitud. Se reordena este punto concreto para habilitar 159 amarres, unos 55 más de los que hay en estos momentos.

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Autoridad Portuaria de Balears acometerá en los próximos meses dos actuaciones que permitirán, en principio, acabar con la lista de espera de amarres por parte de embarcaciones de recreo, consideradas así aquellas que cuentan con menos de ocho metros de eslora. Las dos acciones, que se desarrollarán en la Colársega y Es Castell, suman un incremento de unos 120 puntos de atraque, cuando en la actualidad la lista de espera que gestiona Puertos se sitúa en 124 solicitudes sin atender.

Además, a estos dos proyectos cabe añadir los amarres para pequeñas esloras que se habilitarán con la construcción de una pasarela en el acantilado de Es Castell, entre Moll d'en Pons y Cala Corb. No hay cifra concreta, aunque fuentes de Autoridad Portuaria explican que podrían rondar los noventa. En total, serían algo más de 200 amarres para embarcaciones de recreo que se sumarían a la oferta actual, que son algo menos de 500 de gestión directa por parte de Puertos y 245 en manos de empresas concesionarias, a tenor de los datos publicados en las últimas memorias de la entidad correspondientes a 2017.

La instalación de un nuevo pantalán en la Colársega es un proyecto que acaba de iniciar su proceso de licitación. Contará con 140 metros lineales, sustituye algunas estructuras actuales y reordena los puntos de atraque en la ribera ahora existentes. El resultado son 159 amarres, todos ellos para barcos con esloras menores a ocho metros, con lo que se logra un incremento de unas 55 unidades. Se aprovecha de forma más exhaustiva la lámina de agua existente en esta parte del puerto. El presupuesto de la actuación, que incluye otras obras como la adecuación de varias rampas varadero, asciende a 412.789 euros. El plazo de ejecución es de tres meses.

La creación de unos 65 nuevos amarres para pequeñas embarcaciones, también de gestión directa, en Es Castell está todavía en una fase más temprana. No se ha licitado la obra. La previsión es que se haga dentro de este mes. La habilitación de estos puntos de atraque se visualiza como el momento en el que la lista de espera existente puede quedar prácticamente a cero.

En cuanto a la nueva pasarela para peatones que conectará, también en Es Castell, Cala Corb con Moll d'en Pons, se trata de una gran inversión de 2,4 millones de euros y un plazo de ejecución de ocho meses. Contará con un centenar de amarres, la mayoría para pequeñas esloras. Los sobres con las propuestas de las ocho ofertas presentadas se han abierto y se están evaluando. Una UTE ha sido excluida.