Jorge Campos y Patricia de las Heras, llegando al Parlament. | Pilar Pellicer

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La presidenta de Vox en Baleares, Patricia de las Heras, ha dejado claro que la formación tiene «la mano tendida» al PP, pero simultáneamente ha precisado que los votos de la formación «no se regalan». Marga Prohens ha mantenido este lunes por la mañana la primera reunión oficial con Patricia de las Heras y Jorge Campos para plantear la investidura. Prohens necesita que Vox se abstenga en la segunda votación de la investidura para poder ser elegida presidenta.

Los dos partidos han acordado crear una mesa de negociación para ir cerrando acuerdos programáticos, pero todavía no está claro si se negociará un acuerdo global en todas las instituciones donde se necesita pacto o si será sectorial en cada una de ellas. «Vamos a hacer valer los votos independientemente de cómo se vaya a materializar esa negociación», ha dicho De las Heras.

«Veremos qué fuerza tenemos para alcanzar un acuerdo que saque estas políticas de izquierdas», ha insistido. «Desde el minuto uno hemos tendido la mano para llegar a acuerdos», ha reiterado Campos. ¿Habrá líneas rojas en esta negociación? «Nosotros no tenemos rojas ni las líneas», ha contestado Campos.

La decisión de Vox sobre una abstención que favorezca la Presidencia de Prohens queda condicionada a los resultados de estas negociaciones. «Es verdad que tenemos muchos puntos en común con el PP, pero también es verdad que cualquiera que mire el programa electoral se dará cuenta de que hay cosas completamente diferentes que deben aclararse», ha señalado. Es sobre eso sobre lo que se discutirá en la ronda de negociaciones.

Jorge Campos ha señalado que los ciudadanos han dejado claro que quieren un cambio «en todas las políticas de izquierdas», que han dejado una situación de «ruina, miseria y división». Ha asegurado que Vox pedirá que cambien esas políticas, porque esa es su prioridad. «Quienes nos han votado saben que nuestros votos van a estar ahí en cualquier tipo de negociación y que no vamos a dejar en la estacada a ningún votante de Vox», ha dicho.

En los próximos días se pondrá en marcha esa mesa de negociación para hacer el cambio en las políticas de Baleares. «No estamos hablando ni de reparto de cargos ni de reparto de sillones», ha dicho. Sí ha insistido en que Vox negociará con la voluntad de que sus votantes «se vean representados en cualquier tipo de negociación». Campos no ha querido hablar del reparto de cargos ni de la posibilidad de que Vox exija la Presidència del Parlament a cambio del voto a Prohens o de una abstención.