«Me siento libre en Menorca. Muy libre. Es mi refugio. Aquí soy más yo que en ningún otro sitio». Las palabras pertenecen a la pintora catalana Mercedes Angusto y las pronuncia en «Mi esencia», un cortometraje de seis minutos de duración, rodado íntegramente en la Isla, en el que habla de su visión del arte y su relación con Menorca. Un trabajo audiovisual, firmado por el reconocido fotógrafo y realizador Josep Rodenas, en el que en un tono poético, y «bastante improvisado», tal y como la pintora reconoce, habla de la inspiración con motivo de su última exposición, bautizada también como «Mi esencia» y que acoge actualmente la galería Retxa de Ciutadella.
El amor de la artista por la Isla no es nada nuevo, ya que se ha encargado de gritarlo a los cuatro vientos en diferentes ocasiones. Lo que sí es novedoso es «el paso adelante» que ha dado en su carrera. «Antes era más figurativa, ahora es todo más atmosférico. Me siento más libre». El último año ha sido clave en su trayectoria, y además muy productivo. Prueba de ello es las 32 obras nuevas que actualmente expone, unas piezas en las que el principal protagonismo recae en el mar. «El mar por dentro», puntualiza. «Ha sido como bucear y pintar lo que he visto», añade.
Angusto vive desde hace tiempo entre Barcelona y Menorca, donde están sus dos estudios de trabajo. Al menos visita la Isla una vez al mes para cargarse de inspiración. «Cuando estoy aquí (en Menorca) tengo la sensación de que no me he ido. Me siento parte de todo». Y a continuación, una vez más sale a colación la palabra libertad al hablar de su segunda casa. Una sensación, que en esta nueva etapa artística, en la que ha cambiado en gran parte las pinturas por los pigmentos naturales, apuesta por dejarse llevar. «Son las ventajas de hacerse mayor», confiesa. «Es algo que he descubierto ahora, con el paso del tiempo». Una filosofía de vida que también queda perfectamente plasmada en otras de sus frases del cortometraje: «Hay que dejarse llevar, que la mano fluya, como si estuviera en un baile».
Amor por el mar
Una nueva etapa en la que, a su juicio, la evolución le ha llevado a encontrarse «con el momento en el que más estoy disfrutando de la pintura... Son momentos de entrega, momentos en los que estoy completamente absorbida, solo quiero pintar y descubrir». O lo que es lo mismo, experimentar, algo que en «Mi esencia» se puede comprobar cuando queda inmortalizado en el cortometraje ese impulso de sumergir sus lienzos en el mar. «Tenía la ilusión de que los cuadros fueran parte de mí dentro del agua».
Encantada con el momento artístico en que vive, asegura que ahora «no hay miedo, no hay temor a nada, sigo mi camino». Y el resultado de todo eso queda ahora plasmado en una muestra: «lo que sacas de dentro es tu esencia, en la exposición es como si estuvieras desnuda; es como pasar un examen al juicio de la gente... Cuando alguien compra un cuadro tuyo es como un misterio», reflexiona la artista y protagonista de un cortometraje que, según parece, ha despertado el interés del Consell insular.
2 comentarios
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Esto si es querer la isla. Me gustó mucho el vídeo. Enhorabuena. Un 10!!! Algendar, tú sí que ensucias el mar con tu mal humor, te hace falta un poco de alegría en tu cuerpo, ese mal rollo es el mismo que les entra alas vacas cuando no las muñen.
"Me siento libre en Menorca"... Pues eso no es motivo para ensuciar las aguas con la pinturita...