Desde los orígenes, este es el principio que ha movido siempre a todos nuestros centros de la sanidad privada. Ofrecer al paciente una amplia oferta asistencial, disponible 24 horas al día y 365 días al año. Con los especialistas médicos referentes de la Comunidad, en unas instalaciones en constante renovación, con equipamiento tecnológico avanzado y todo accesible para el paciente de forma ágil. En conjunto, ofrecer un tratamiento personalizado, cálido y acogedor que cuida las necesidades del paciente y las de sus familiares.
Afortunadamente, la sanidad privada cuenta históricamente con un excelente arraigo y aceptación entre los habitantes de las islas, precisamente por estas altas prestaciones ofrecidas por los diferentes centros hospitalarios privados. En datos, destaca la alta tasa de penetración de las compañías de seguros médicos privados superior al 30%. Un factor que sin duda contribuye a liberar recursos en el sector público y al buen funcionamiento del sistema, por ejemplo, reduciendo las listas de espera quirúrgicas. Otro dato, que demuestra la excelente coordinación entre el sector público y el privado en Balears, es el 8,6% de gasto sanitario distribuido en diferentes fórmulas de colaboración a través de conciertos y convenios, cifras que solo superan las Comunidades de Madrid y Cataluña. Según avalan, los datos actualizados por el informe de la Fundación IDIS, «Sanidad privada, aportando valor 2023».
Adaptación y transformación de nuestro entorno en beneficio del paciente. Desde el sector, nuestra misión, es sostener siempre este compromiso con la salud. Mantener nuestra presencia e implantación territorial, brindando una atención de máxima calidad que anime cada vez a más pacientes a optar por nuestro entorno de servicios.
En la actualidad, irrumpe con fuerza un nuevo componente que resulta decisivo, me refiero a los diferentes procesos de Transformación digital, que se están abordando en el sector de la Salud. En poco tiempo se ha convertido en un elemento disruptivo que a través de la digitalización y el Big Data cambiará la relación del paciente con el hospital y con el especialista. Es un nuevo paso para alcanzar una medicina más ágil, eficaz y personalizada, que simplifica los trámites y mejora la comunicación con el paciente.
A modo de ejemplo, mediante el Portal del Paciente digital de Quirónsalud, que, de forma confidencial, permite gestionar las citas con el especialista, acceder a informes o a los resultados de pruebas diagnósticas, así como consultar su historia clínica u obtener recetas médicas sin acudir al hospital.
Otra funcionalidad es la autoadmisión en consultas externas, mediante el Portal del Paciente o mediante quioscos ubicados en la entrada de los centros hospitalarios que permiten al paciente comunicar que ya ha accedido al hospital sin necesidad de hacer la cola en el mostrador.
Por otro lado, también se están implementando nuevas posibilidades que pueden evitar desplazamientos innecesarios al hospital, por ejemplo, un servicio de contacto online con un especialista que atendería al paciente por vía telefónica o por videoconsulta.
En definitiva, diversos ejemplos sobre cómo se pueden aplicar los avances tecnológicos en beneficio para el paciente. Es decir, un nuevo paso para mejorar la atención, para seguir como desde los inicios buscando la excelencia. El presente y el futuro es interactuar con el paciente, adaptarse a sus necesidades y estar a la altura de sus expectativas. Es enorme el trabajo realizado y mayor la ilusión por lo que todavía nos queda por hacer.l