La cuarta victoria consecutiva de España, que minimizó a Noruega en su casa y la condenó a la repesca, le dio la clasificación para la gran cita de Alemania con aún dos partidos por jugar, ante Chipre y Georgia. El VAR anuló un tanto a Álvaro Morata en el primer acto y tardó cuatro minutos en dar validez al de Gavi. Junto a España y a falta de decidirse el liderato del Grupo A, selló Escocia su pase a la Eurocopa.
No fue una actuación brillante, pero sí solvente. Y una victoria justa. Porque España fue mejor que una decepcionante Noruega, que estaba obligada a ganar y ni siquiera a balón parado o recurriendo al pelotazo metió en problemas a Unai Simón, que vivió una noche plácida.
España controló el partido de cabo a rabo, aprovechó una oportunidad cuando más acosaba y anuló a Haaland, que sólo dejó algún chispazo aislado y nunca pudo recibir donde es más peligroso.
Tres novedades introdujo Luis de la Fuente. Una obligada, la de Fran García por el lesionado Balde; otra esperada, con Fabián Ruiz en el medio por Mikel Merino; y la última, una sorpresa: el regreso al once titular, un año después, de Ansu Fati.
Por el mismo número de cambios optó también el seleccionador noruego, Ståle Solbakken, haciendo debutar como titular al joven talento del Manchester City Oscar Bobb.
En el caso de Noruega, hubo además modificación en el esquema: del 4-3-3 habitual a un 4-5-1, con Haaland solo en punta, esperando atrás con las líneas bien juntas, cediéndole el balón a España y buscando lanzar a su estrella en alguna contra.
Pero fue España la que se impuso claramente en la primera parte, guiada por un Rodri notable, moviendo la pelota con criterio de lado a lado y con mucha movilidad arriba.
Así fueron llegando las ocasiones, ni muchas ni demasiado claras, casi todas por fuera, como una subida de Carvajal, que tiró desviado dentro del área cuando el pase a Morata parecía la mejor opción. O un tiro flojo de Morata, que minutos antes había arruinado lo que era un gol en propia puerta de Strandberg por querer tocar la pelota cuando esta ya entraba.
El capitán español estuvo cerca en un cabezazo complicado que salió cerca del larguero. Y dos tiros lejanos de Carvajal, muy activo en ataque, y de Rodri metieron el miedo en el cuerpo a los noruegos, que dieron una floja impresión en los primeros 45 minutos.
Noruega estuvo apocada y acabó metiéndose tan atrás, que no había forma de encontrar a Haaland, bien atado por Le Normand y Laporte. Aun así, le sacó una amarilla al central de la Real Sociedad y tuvo una ocasión clara en un mal despeje de Fran García, pero su remate a bocajarro rebotó en un defensa.
La imagen de la impotencia noruega era su capitán, Ødegaard, que hacía aspavientos al público pidiendo apoyo y pedía a sus compañeros que presionaran más arriba.
De la Fuente no pareció quedar sin embargo del todo contento del todo e hizo dos cambios en el descanso: David García por el amonestado Le Normand y Oyarzábal por un irregular Ansu Fati.
Ferrán Torres avisó en una internada y un toque que se paseó por la portería de Nyland, preludio del gol de Gavi en una jugada confusa de rebotes y posibles fueras de juego, que fue analizada durante varios minutos en la sala VOR y acabó con gol español.
El resultado dejaba muy lejos de la Eurocopa a Noruega, que con media hora por delante movió el banquillo y recuperó su 4-3-3 habitual, en busca de la remontada. Ganó algo más de presencia, pero no acabó de inquietar a Unai Simón.
España, que no veía amenazado el resultado, dio un paso atrás y siguió tocando, pensando más en dormir el partido y cerrarlo, sin renunciar a aprovechar los espacios que ahora sí dejaba la selección nórdica, que no reaccionaba.
Salió Pedraza, otro debutante, y España pasó a jugar un 4-4-2 para cerrar las bandas, que parecían la única vía de entrada de Noruega. Pero quien seguía chutando más a portería era el equipo de De la Fuente, como en dos lanzamientos desviados de Ferrán y del jugador del Villarreal, que actuó como doble lateral por la izquierda.
Noruega era un ejercicio de impotencia. Apenas un tiro al primer toque con la derecha de Haaland, y algún lanzamiento de Nusa, todos detenidos sin apuros por Unai Simón, dejaron los locales en la última media hora, en la que a España le faltó algo de claridad y de colmillo para hacer el segundo.
El encuentro acabó con un rondo español frente a una Noruega entregada, que queda a la espera de si puede meterse en la repesca para volver a una fase final que no juega desde la Eurocopa 2000, donde logró su único triunfo sobre España en diez enfrentamientos.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Menorca - Es diari
De momento no hay comentarios.