El getafeño Colegio Aristos ha sido el centro de operaciones de esta suerte de convocatoria, encabezada y dirigida por la exjugadora internacional Ana Junyer, y promovida por la FEB con el deseo de empezar a «especializar» a los futuros y futuras talentos de la geografía nacional en el universo 3x3.
La inclusión de la base-escolta menorquina en la misma, además de acreditar su condición de ‘top prospect' de nivel estatal (solo 18 jugadoras de todo el país disfrutan de esta oportunidad), significa asimismo el reconocimiento a una trayectoria tan impactante como prometedora.
Rápida y de gran potencia, dotada de un tren inferior «por encima de la media», en lo que se entiende un factor que le concede ese plus diferencial sobre la mayoría de sus coétaneas, junto con su visión y capacidad para leer el juego, «una característica también impropia a tan temprana edad», precisan desde su entorno, Aina, que alza 1.73 de estatura y nació en 2008, se inició en la ‘Escoleta' del CD Alcázar a los cinco años de edad (aunque sus primeras canastas se remontan a cuando tenía solo cuatro).
Al llegar a ciclo infantil la Isla y su hábitat competitivo se habían quedado absolutamente desfasadas en función del nivel, progresión y calidad detentado por nuestra joven protagonista, por lo que su trasvase al CTEIB mallorquín resultó una consecuencia natural (también, un ‘viejo' anhelo de Aina).
En Palma, actualmente, y a pesar de ser cadete de primer año, la excanterana del Alcázar forma parte de la plantilla junior del CTEIB, uno de los mejores conjuntos de la categoría balear, donde desempeña un rol protagónico, asimismo un continuismo a la evolución, constante, que presenta desde hace un lustro y que la ha convertido en asidua de las selecciones de Balears formativas (con la que ha sido campeona de España) y ahora también, del método FEB.
Bajo el radar y el ‘scouting' de varias de las canteras más importantes del país, Aina Real, que ha rechazado diversas propuestas para integrarse en algún proyecto de primer orden en el ámbito peninsular, y cuyo sueño sería alcanzar la versión femenina de la NBA (la WNBA), tiene por deseo y prioridad a corto plazo seguir en el CTEIB –cuanto menos un par de años más– donde entrena cinco horas al día (y el resto de la jornada lo invierte en estudiar y descansar) con el objeto de seguir creciendo y mejorando, como jugadora y como persona. Una auténtica talento en ciernes.
El apunte
La exjugadora Ana Junyer, primer rostro del cuerpo técnico
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Menorca - Es diari
De momento no hay comentarios.