El detective condenado, durante el juicio en la Audiencia.

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La Sala de lo Civil y Penal deja en un año y once meses de cárcel la condena para un detective privado de Palma condenado por abusos sexuales hacia una joven. El tribunal estima de manera parcial el recurso planteado por la defensa, ejercida por el abogado Carlos Barceló, contra la condena que le impuso la Audiencia de más de tres años de cárcel que sí implicaba el cumplimiento obligado de la condena en la cárcel.

Los hechos ocurrieron en el año 2017. El acusado conocía a la víctima porque esta era la hija de un amigo suyo. Coincidieron en una cena familiar y la joven bebió una notable cantidad de alcohol. El condenado la invitó a llevarla a casa en su coche y, cuando esta subió le propuso tomar una última copa en la suya, donde abusó de ella. La víctima aceptó ir porque consideró que se trataba de algo seguro ante la relación de amistad entre el acusado y su padre.

El TSJIB coincide con la Audiencia en que los hechos encajan en un delito de abusos sexuales dado que la víctima «no pudo prestar un consentimiento válido» dado que «sí se encontraba gravemente afectada por el consumo de alcohol». Recuerda que la víctima declaró en el juicio que fue usada «como un muñeco de trapo». Así, descarta la absolución, la principal pretensión de la defensa.

El TSJIB sí admite una rebaja de la condena al valorar más que la primera condena de la Audiencia dos atenuantes: las dilaciones en el procedimiento y el pago de una indemnización por parte del acusado, aunque menor que la fijada en condena: abonó 8.000 euros antes del juicio aunque luego fue condenado al pago de 18.000.