En declaraciones a IB3, recogidas por Europa Press, la consellera se ha defendido de críticas sobre la tardanza en actuar los protocolos de emergencia, algo que Cladera ha negado tajantemente. «No esperamos hasta las 21.00 horas para actuar, ni mucho menos.
En cada momento hay decisiones tomadas y se puede demostrar con más detalle», ha afirmado.
Así, la responsable de Administraciones Públicas -Conselleria de la que depende la Dirección General de Emergencias-, ha insistido en que el Govern y el 112 actuaron «de la forma que tocaba con la información que había en ese momento».
Según ha indicado, las primeras llamadas avisando de incidentes en Sant Llorenç se produjeron a las 18.30 horas y entonces el 112 ya avisó a todos los servicios de emergencias.
A partir de las 19.00 horas se intensificaron las llamadas, pero el municipio quedó incomunicado, por lo que desde Emergencias ya sabían que «algo grave» estaba pasando y se comenzaron a tomar medidas.
De hecho, a las 20.30 horas se hizo un preaviso a la Unidad Militar de Emergencias (UME) en previsión de que había una situación grave. Cladera también ha puntualizado que en ese momento la alerta Meteobal era amarilla y no naranja.
A las 21.00 horas se aplicó el Plan Inunbal 2. Según ha aclarado la consellera, esto supone que la Comunidad Autónoma asuma el mando de la coordinación, cuando hasta entonces recaía en los municipios.
«No quiere decir que antes no hubiera actuación», ha defendido Cladera, que ha sostenido que la activación de este plan es «un cambio administrativo» sobre «quién toma las decisiones».
Además, Cladera ha recalcado que la noche de la tragedia 200 personas fueron rescatadas. Por otro lado, Cladera ha informado de que este viernes trabajarán 600 efectivos de los diferentes cuerpos de seguridad y que han delimitado una zona para intensificar la búsqueda del niño de cinco años que continúa desaparecido.
También ha señalado que de momento hay más de un centenar de animales muertos. Finalmente, la consellera ha agradecido la «solidaridad» de los voluntarios pero ha insistido en que es necesario «dosificar» la llegada de esta ayuda.