El británico afincado en Menorca, Paul Crane, es el gerente y propietario de la empresa Coversec Baleares, que opera desde 2007 para todo el archipiélago y la Península. | Gemma Andreu

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Quien viva en Menorca y en las islas en general, sabrá perfectamente que la humedad, tanto por condensación como por capilaridad, es uno de los inconvenientes más frecuentes en viviendas y edificios. Los altos niveles de humedad al que estamos sometidos los isleños así como también el tipo de construcción que se ha realizado, han hecho que desde siempre haya sido una asignatura pendiente del confort y la salubridad. Sin embargo, existen empresas que han sabido encontrar soluciones para hacer frente a este reto como Coversec Baleares, especializada en ofrecer tratamientos y soluciones de impermeabilización para construcciones y toda clase de superficies. Desde hace casi veinte años, se han convertido en todo un referente para arquitectos y aparejadores, operando no solo a nivel insular sino también en Balears y en la Península.

ORIGEN. Fue en 2007 cuando el empresario de origen británico afincado en Menorca, Paul Crane, descubrió Don & Low, un fabricante escocés de renombre internacional especializado en la producción de textiles técnicos, una sólida compañía con más de dos siglos de trayectoria y numerosas patentes, dedicada a desarrollar e innovar en productos y soluciones basadas en el propileno textil para distintas aplicaciones. «En aquella época, tenía un negocio de pupilaje de vehículos en custodia y conversando un día por casualidad con un cliente, me estuvo explicando la idoneidad de estos productos en materia de impermeabilización para solucionar problemas de humedad», explica el gerente de Coversec Baleares. «Se trataba de un tipo de tela de lámina de propileno cuya transpirabilidad lo hacía único, ayudando de manera definitiva a acabar con los típicos problemas que ocurren en Menorca con la humedad», añade.

La conversación no se quedó allí sino que empezó a investigar y se dio cuenta de las ventajas de su aplicación en materia de rehabilitación tanto para superficies como para terrazas. De este modo Paul Crane contactó con el fabricante con la idea de hacer una prueba con la lámina en la Isla de la mano de un constructor que conocía. Un experimento que le acabó convenciendo del todo para constituir la sociedad Coversec Baleares y convertirse en distribuidor oficial para todas las Islas.

VAPORSEC. La primera labor que tuvo que hacer Paul Crane fue de promoción del nuevo producto a los profesionales de la construcción y la rehabilitación en Menorca para que probasen la lámina antihumedad y se convenciesen de que era una solución económica y eficaz para todo tipo de daños causados por humedades y goteras en tratamientos de marés y bloques antiguos. «Una de las primeras cosas que hice, fue crear la marca Vaporsec Pro y registrarla con la idea de que fuera más fácil la comercialización. Su máxima transpiración para poder utilizarla en duchas, bajo suelos con revestimiento cerámico, en paredes de marés y bloque antiguo y superficies planas o incluso con pendientes como es el caso de terrazas y balcones, lo hacía muy interesante pero necesitaba que los profesionales lo conocieran y de algún modo, sirviera de aval para su posterior aplicación», detalla. En aquel momento alquiló una oficina en la calle María Luísa Serra de Maó que durante los primeros años, se convirtió en despacho y almacén. Poco a poco, consiguió ir llegando a arquitectos y aparejadores que se empezaron a convertir en los prescriptores de su solución en los trabajos de rehabilitación e incluso obra nueva.

NUEVA ETAPA. En 2014 Coversec Baleares pasó de ser distribuidor a importador directo en exclusiva para su venta a clientes mayoristas, con el ofrecimiento de tres tipos de lámina distintas de impermeabilización, consiguiendo implantarse en tres puntos de venta de Menorca. En este sentido también firmó un acuerdo con un almacén mayorista en Mallorca e incluso participó en algunas ferias destacadas como Hábitat Construcción. En 2018 inició una segunda etapa de la empresa con la introducción de nuevos productos y accesorios para el trabajo contra la humedad que podría comercializar de manera directa a las empresas de construcción. «A parte de la lámina de impermeabilización, también es muy importante tanto su aplicación como los productos que se utilizan para ello. Es por esto que encontré un hueco de mercado en el sentido de que los constructores, una vez adquirida la lámina, necesitaban dotarse de productos asociados fiables para la colocación de las láminas impermeabilizantes como por ejemplo una pintura de imprimación que se agarre bien a superficies problemáticas, revestimientos impermeables para sellar juntas en la lámina o para impermeabilizar terrazas, así como también pintura transpirable de calidad, que siempre se necesita», detalla Paul Crane.

Coversec Baleares
La correcta aplicación de las soluciones contra la humedad.

Así mismo también decidió que podría ser interesante comercializar maquinaria para la aplicación de los revestimientos. En paralelo, llegó a un acuerdo con otro fabricante de soluciones de impermeabilización y aislamiento, en este caso, una empresa de Zamora, que había desarrollado un tipo de imprimación texturizada para fachadas, terrazas y tejados, utilizando corcho natural proyectado en treinta colores distintos, un producto ecológico y aislante que ayudaba a la insonorización y que una vez aplicado, no necesitaba mantenimiento. «Este acuerdo comercial también me permitió poder llegar a la península para distribuir mis propios productos», comenta.

MOMENTO ACTUAL. Desde la pandemia, las ventas de Coversec Baleares se han disparado y cada año está incrementado progresivamente su facturación. «Estamos anualmente en las 25 toneladas suministradas y subiendo. Nosotros creemos que el hecho que la gente tuviera que quedarse encerrada en casa durante tantos meses, les hizo abrir los ojos para darse cuenta de la necesidad que tenían de solucionar problemas en sus viviendas que afectan al confort y la calidad de vida de las personas. Al final, los consumidores quizás no sepan que existimos pero su arquitecto o su constructor de confianza seguramente sí y esto ha hecho que se hayan decidido por invertir en mejorar las viviendas», explica Paul Crane. En estos momentos están intentando encontrar distribuidores de su producto en Eivissa para poder acabar de cerrar el círculo ya que están convencidos que también será un producto bien recibido.