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Después de tres meses de incertidumbre tras sufrir un intento de robo armado en su casa, el influencer y empresario Miguel Ángel Aguilar falleció este sábado, día 21 de diciembre, a la edad de 43 años a causa de sus lesiones. Una trágica pérdida que supone un duro revés para el mundo del fitness, todavía conmocionado por la muerte de Jaxon Tippet.

Los hechos ocurrieron el pasado 13 de septiembre, cuando Aguilar y su esposa, Priscilla Valles, una conocida influencer especializada en extensiones de pelo, fueron atacados por cuatro hombres armados en su domicilio, situado en Bel-Air, en Los Angeles.

Sin embargo, no fue hasta el día siguiente cuando se dio a conocer la noticia desde la cuenta oficial de Instagram de Self Made Family HQ, la empresa que dirigía el CEO. En su comunicado, la compañía anunciaba que el influencer estuvo envuelto en "un incidente grave" en el que "resultó herido de bala", por lo que tuvo que ser ingresado de urgencia en el hospital en la unidad de Cuidados Intensivos.

Según las autoridades locales, el grupo de asaltantes abrió fuego en repetidas ocasiones contra el estadounidense, impactándolo en la cabeza en un intento de robar su reloj Rolex. En medio del violento incidente, uno de los agresores perdió la vida, mientras los demás lograron huir.

Este domingo, asimismo fue la misma cuenta corporativa quien se encargó de compartir con sus seguidores la muerte del dueño de los gimnasios de Self Made Family, tras varios meses de "valiente batalla". "Miguel falleció pacíficamente el 21 de diciembre de 2024 rodeado de sus seres queridos", explicaron, antes de destacar su "duradero legado".

"Miguel era más que un simple líder; fue un visionario, una inspiración, un mentor, un padre, un esposo, una familia y un querido amigo para muchos", añadieron, comprometiéndose a mantener el "espíritu" de Aguilar en su proyecto empresarial, siendo "fieles" a su "misión y valores".

En relación con el violento asalto ocurrido en su vivienda, tres hombres de Oakland han sido detenidos como principales sospechosos del tiroteo y robo. En caso de ser declarados culpables, asimismo, podrían enfrentar cadena perpetua bajo los cargos de asesinato, intento de robo y agresión con arma de fuego, según la oficina del fiscal del condado de Los Ángeles.