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Que la posición de Johnny Depp dentro de la jerarquía de Hollywood ya no es la que era durante la década pasada es algo bien sabido. Tras las acusaciones de malos tratos por parte de su ex Amber Heard, más el posterior juicio por difamación, el perfil del actor de Eduardo Manostijeras está a años luz del que sostuvo cuando era uno de los actores jóvenes más valorados de la industria.

Ahora bien: ¿le importa eso a Johnny Depp? A juzgar por una entrevista concedida a The Hollywood Reporter, en absoluto. Desde el festival de Roma, donde presenta Modi (el biopic del pintor Amedeo Modigliani que ha dirigido con Riccardo Scamarcio y Al Pacino como protagonistas), Depp asegura que su caída en desgracia no le ha quitado el sueño en lo más mínimo.

"Si odias, quiere decir que te importa"

"En este mismo momento, puedo sentarme y pensar en todas las noticias que se escribieron, en cómo todo el mundo estaba contra mí, en cómo me dieron por acabado", recuerda Johnny Depp. "Lo recuerdo todo, lo soporté todo. Algunas partes no fueron bonitas, algunas fueron hilarantes y otras fueron una locura", reflexiona el actor.

Tras referirse a dicha etapa como un proceso de maduración ("Con cada cosa que experimentas, desde comerte un helado a pasear al perro, aprendes algo por el camino"), Depp asegura haberlo dejado atrás. "No le guardo rencor a nadie. No tengo una gran reserva de odio acumulado, porque eso quiere decir que te importa. ¿Por qué cargar con esa mochila?".

Asimismo, el actor confirma que sus desencuentros con la industria vienen de lejos, y afirma sentirse a gusto con su posición actual. Una posición que, por lo demás, no tiene ganas de abandonar. "Todo esto ha sido... en fin, es lo que hay. Hasta cierto punto, esto va a seguir. Es como si fuera lo de OJ Simpson, o algo así. Pero bueno, ocurrió, y eso es todo".

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