En las últimas horas ha sorprendido en las redes sociales un vídeo que retrata un instante de una boda celebrada recientemente en el Casino de Madrid. En él se evidencia que el uso de la mascarilla es una utopía en el caso de los invitados al enlace, a diferencia de los camareros que sí que la portan.
Las imágenes de la boda en Madrid en tiempos de COVID que recuerdan mucho, quizás demasiado, a una boda que se pudiera haber celebrado en la 'vieja normalidad' se corresponden al día en el que el empresario Jaime Navarro, exfutbolista canterano del Real Madrid, y Beatriz Ungría, emparentada con la realeza de Bulgaria, se convirtieron en marido y mujer ante numerosos testigos. Lo que se aprecia solo en este breve fragmento, replicado por numerosas cuentas de usuario como el caso de la regidora de Palma Sonia Vivas, ha desatado la polémica en las redes sociales.
La pareja se casó este pasado sábado en el Casino de Madrid y además de causar furor en los principales medios sociales algunos medios de comunicación se han hecho eco de estos hechos.
Cabe decir que, entre numerosas críticas, algunos usuarios dudaron razonablemente sobre la fecha de la boda. Algunos apuntaron que, quizás, se tratara de una celebración del pasado verano, cuando las medidas sanitarias contra el coronavirus eran algo más laxas. Sin embargo, más tarde se comprobó que la reunión se celebró recientemente en el citado centro madrileño.
Alguien, además, apuntó que estos invitados podrían haberse reunido previa prueba de antígenos o incluso PCR, dado el estatus que aparentan tener, algo que en todo caso no se ha constatado.
A continuación, algunos de los comentarios que han suscitado más interés en Twitter sobre una cuestión que ha aglutinado miles de menciones en las últimas horas:
1 comentario
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Los pijos siempre han creído que las normas no van con ellos, en tiempos de pandemia y antes.