El actor Imanol Arias, en el banquillo de los acusados. | FERNANDO ALVARADO

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El actor Imanol Arias abonó este lunes 3 de junio casi 275.000 euros para terminar de saldar su deuda con Hacienda antes de alcanzar un acuerdo con la Fiscalía por el que aceptó haber cometido fraude fiscal a cambio de una condena de dos años de prisión por la que no entrará en prisión. El acuerdo alcanzado, al que ha tenido acceso EFE, incluye la propuesta de suspender la entrada a prisión del actor a cambio del pago de una multa de 25.000 euros, a lo que no se opone el fiscal.

El escrito especifica que, con posterioridad al inicio de las actuaciones inspectoras de Hacienda y al inicio de la investigación judicial, Arias ya realizó diversos ingresos por los ejercicios entre 2010 y 2014, de hasta 1.951.171,24 euros.

Y recoge que, el pasado lunes, Arias abonó a Hacienda 275.801,04 euros en total por diferentes conceptos, entre ellos una cuota tributaria pendiente de pago del ejercicio 2010 e intereses de demora de ese año y posteriores, hasta 2014. «La responsabilidad civil, incluyendo cuota tributaria e intereses de demora tributarios, está íntegramente satisfecha», reza el acuerdo.

El actor se sentó ayer, martes, en el banquillo junto a Ana Duato, compañera de reparto en la serie 'Cuéntame cómo pasó', y otros 26 acusados en el juicio que arrancó en la Audiencia Nacional por presuntos delitos fiscales a través de estructuras opacas diseñadas por el despacho de abogados Nummaria.

Ambos están acusados de tributar indebidamente parte de sus ingresos de la conocida ficción, por lo que la Fiscalía Anticorrupción solicitaba inicialmente para Imanol Arias 27 años de prisión por un fraude de 2,7 millones de euros entre 2009 y 2015, petición de condena que ahora se ha visto reducida por el pacto de conformidad.

Por su parte, Ana Duato y de su esposo, Miguel Ángel Bernardeau, productor de la serie de televisión, han alegado en el juicio este miércoles que no son responsables del fraude fiscal que se les imputa y han pedido su anulación para evitar la «pena de banquillo».

Ella, que también ha devuelto parte de la cantidad supuestamente defraudada, se sigue enfrentando, por lo tanto, a una petición del fiscal de 32 años de prisión por un presunto fraude de 1,9 millones de euros entre 2009 y 2017, mientras que para su marido la Fiscalía solicita 18 años de prisión.