Marine Le Pen, líder de la ultraderecha de Francia. | Reuters

TW
0

La líder de la extrema derecha francesa, Marine Le Pen, formalizó este jueves una moción de censura contra la primera ministra, Élisabeth Borne, que se suma a la que presentó el miércoles la izquierda. Las dos mociones de censura, que deben debatirse en los próximos días pero que no tienen ninguna posibilidad real de salir adelante, son consecuencia de la decisión de Borne de recurrir a un mecanismo constitucional para aprobar los presupuestos de 2023 sin someterlos al voto de la Asamblea Nacional, donde no tiene mayoría absoluta. En su texto de justificación, Le Pen y los otros 88 diputados de su partido, la Agrupación Nacional insisten en que a pesar de no haber obtenido esa mayoría absoluta en las elecciones de junio pasado «no ha buscado nunca compromiso, ni ha querido en ningún momento modificar su proyecto político».

A su juicio, la primera ministra no ha querido asumir el resultado de esos comicios «que debería obligarla no sólo al diálogo, sino al compromiso». Es más, reprochan al Ejecutivo y a los parlamentarios que lo apoyan que «mantengan a cualquier precio una hoja de ruta decidida antes de las elecciones presidenciales pese a la crisis energética, social y económica que sacude Francia y los países occidentales». Y en definitiva, que se mantengan «en una lógica maximalista, sorda a las aspiraciones del país». El grupo parlamentario de RN critica que el Gobierno haya rechazado en el debate parlamentario un gran número de enmiendas en el debate sobre el presupuesto que aumentaban los ingresos y sobre todo que se ha negado a «reinstaurar cualquier forma de justicia fiscal». Insiste en que el presupuesto del Ejecutivo del presidente, Emmanuel Macron, «no responde para nada a los grandes retos» que tiene planteados el país, en particular «con las crisis migratoria, de seguridad, energética y, por supuesto, de poder adquisitivo». Borne activó el miércoles el artículo 49.3 de la Constitución que le permite aprobar los presupuestos u otro proyecto de ley sin ser sometido al voto del Parlamento, pero la contrapartida es que eso abre la posibilidad para que, en un plazo de 24 horas, la oposición presente mociones de censura. Si alguna de las mociones recibieran el apoyo de la mayoría absoluta de la Asamblea (289 diputados) los presupuestos no saldrían adelante y Borne tendría que presentar su dimisión.

El presidente Emmanuel Macron ya ha advertido de que si cae el Gobierno convocaría elecciones anticipadas, con lo que disolvería la Asamblea Nacional elegida en junio pasado. Sin embargo, tanto la que presentó el mismo miércoles la coalición de izquierdas NUPES, que reúne a La Francia Insumisa, los socialistas, los comunistas y los ecologistas, como la de Le Pen no podrán conseguir esos 289 votos. La razón es que unos y otros ya han adelantado que no se van a apoyar mutuamente. La fecha o las fechas para la celebración de los debates se decidía en la tarde noche de este jueves en una reunión en los presidentes de los grupos parlamentarios de la Cámara Baja.