Cartelería de Alternativa por Alemania ante las próximas elecciones regionales. | Reuters - FILIP SINGER

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Uno de los colíderes del partido ultraderechista Alternativa por Alemania (AfD), Tino Chrupalla, está hospitalizado desde ayer por la noche tras un incidente aún por esclarecer que se produjo en un acto electoral, según informó su partido.

Los hechos ocurrieron durante un mítin en Ingolstadt, en el sur del país, cuando Chrupalla sufrió un desvanecimiento poco antes de subir al escenario y posteriormente otros síntomas como náuseas y mareos, por lo que fue trasladado a una clínica cercana, donde se encuentra todavía en observación. La policía ha afirmado que no existen por el momento indicios de que se haya producido un delito imputable a terceros, pero la fiscalía ha abierto una investigación basándose en la versión de los hechos narrada por el propio colíder de la formación ultra.

Éste, según informan medios alemanes, afirmó haber sentido algo similar a un pinchazo repentino y haber descubierto después una pequeña lesión en su piel, antes de que comenzara a sentirse indispuesto. En un comunicado, la policía de Baviera Superior informó de que Chrupalla fue traslado a un hospital «sin que en ese momento fuera reconocible una lesión evidente» y ha pedido la colaboración del público, al que conminó a enviar fotos y vídeos del evento.

La fiscalía, por su parte, confirmó en declaraciones al semanario «Der Spiegel» que ha abierto diligencias por una sospecha en fase preliminar de un delito de lesiones perpetrado por desconocidos. El pasado martes, la otra colíder de la AfD, Alice Weidel, canceló su participación en un acto electoral en la localidad de Mödlareuth por razones de seguridad, ya que supuestamente los servicios de seguridad le advirtieron de un posible atentado.

«Ella y su familia han sido evacuadas de su vivienda privada y trasladados a un lugar seguro», dijo un portavoz del partido en el evento. Más tarde trascendió que Weidel se encontraba en ese momento veraneando en Mallorca. El próximo domingo se celebran elecciones regionales en los estados federados de Baviera y Hesse y se espera que la ultraderecha mejore sus resultados de forma significativa, con sondeos que pronostican aproximadamente un 14 y un 15 % del voto respectivamente.