Así se ha expresado Pere Joan Pons en un acto con militantes en Ariany con el que los socialistas de las Islas han dado inicio a la precampaña electoral. Según el PSIB, asistieron más de 150 personas.
Pons, que repite como candidato al Congreso, ha defendido que el PSOE «es la única alternativa clara» a PP, Ciudadanos y Vox, al que ha calificado como un «partido que propaga el odio, la violencia y la xenofobia». «Cada voto que no se haga será un voto que irá directo a estos tres partidos», ha declarado.
El cabeza de lista al Congreso ha animado a los militantes a «volver a hacer historia» para «consolidar» el proyecto progresista de Baleares.
Por su parte, la secretaria general del PSIB y presidenta del Govern, Francina Armengol, ha afirmado que «el partido está más fuerte que nunca», y que «ir a votar es un deber» y «una responsabilidad».
Paralelamente, el candidato al Senado por Mallorca, Cosme Bonet, ha recordado el trabajo realizado por el Gobierno socialista en España el último año, y ha llamado a la movilización para no «lamentar durante cuatro años que la ultraderecha gobierne por no haber invertido 20 minutos en ir a votar».
La también candidata al Senado por Mallorca, Susanna Moll, se ha expresado en los mismos términos, aseverando que lo que quiere la derecha es calar en la ciudadanía «el discurso de la frustración» para «despistarla de lo que es realmente importante».
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