Ya estamos en Agosto, el mes más veraniego es lo que muchos dicen y posiblemente el más caluroso. Ha llegado el momento de la gran trashumancia en lo que será la última etapa de la escapada del ser humano, si su bolsillo se lo permite, en busca de esos paraísos terrenales y que, al tomar posesión del espacio que le corresponde según lo invertido, se da cuenta de que no es oro todo lo que reluce y que esa paz soñada de siesta en hamaca, de silencio sepulcral solo mecida por el cántico de algún ruiseñor y la brisa rebotada con sabor a mar que vaya usted a saber de dónde le llega, como si alguien tijera en mano le cortara las sujeciones de esa hamaca, se da de narices en lo que es la pura realidad. Amigos, conocidos, colegas de curro se le presentan como si usted hubiera emanado algún extraño elixir cuyo rastro parecen haber captado todos esos energúmenos llegados del más allá.
Granos de arena
Fundiendo neuronas
Menorca06/08/24 4:00
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