Coinciden mañana en Menorca dos grandes referentes de la prensa escrita: Ignasi Aragay en el Cercle Artístic de Ciutadella y Antonio Caño en la Fundació Rubió de Maó. Ambos con sólidas trayectorias profesionales y diferentes concepciones y estilos para ejercer la profesión, pero comprometidos con el principio «ante la duda, periodismo».
Ignasi Aragay (Barcelona, 1966), director adjunto del diario «Ara», que será presentado por el periodista y doctor en Periodismo Miquel Àngel Limón, explicará «La crisi de la premsa des de dins», en el ciclo sobre «Pensament crític: un procés amenaçat?».
Y Antonio Caño (Martos, Jaén, 1957), que fue corresponsal de «El País» en Estados Unidos de 2006 a 2014 y dirigió el rotativo desde de mayo de 2014 a junio de 2018, analizará «El poder político y los medios de comunicación».
Trabajé con Aragay durante mi etapa como corresponsal en Balears del diario «Avui», donde el autor del «Diccionari Montaigne» (2009) demostró su instinto periodístico y sabiduría durante veinte años, los ocho últimos como jefe de la sección de Cultura y Espectáculos del «Avui». Su ilusión consiste en «hacer un gran diario en catalán, de nivel europeo». Se incorporó al «Ara» cuando aún no sabía como sería este diario.
Antonio Caño, que en 2013 ya había puesto en marcha la edición América de «El País», transmitió su vigorosa personalidad desde la dirección del diario de Prisa, con la creación de un equipo para redactar contenidos digitales, distintos de la edición en papel. En dos años duplicó la audiencia y también los ingresos por publicidad digital con un modelo de información de libre acceso.
En marzo de 2016, con motivo del 40 aniversario de «El País», anunció la transformación del diario en una cabecera únicamente digital: «Empiezo a tener la impresión de que el paso del papel a lo digital es solo uno y no el más grande de los muchos pasos que los periódicos tendremos que dar hasta alcanzar nuestro verdadero espacio futuro», sostuvo. El papel resiste y también se transforma.