El carácter también está presente en las acciones políticas, y aún por mejor decir, el carácter condiciona un estilo de hacer política. Los exaltados no pueden ser buenos políticos, les pierden el pronto que tienen. Los agresivos tampoco, porque suelen ser los que piensan que los problemas de la ciudadanía son como clavos que hay que tratar a martillazos. Los vengativos son además muy peligrosos, basan sus acciones en hacer todo el daño que pueden a quién un día entorpeció sus egoísmos, puso freno a sus desmanes o cortó de cuajo sus privilegios, o simplemente, le puso en su sitio. Un vengativo con poder es alguien que ha nacido con una quijada de asno bajo el brazo. Al que le gusta que le adulen nunca será un buen mandatario; el hombre que se alimenta con la adulación más le valdría morirse de hambre.
Sa gleva
Carácter y política
25/11/19 18:17
También en Opinión
- Un excursionista belga aparece muerto en el Camí de Cavalls
- Detenida madre e hija por agresión y daños a otra mujer en un bar de Ciutadella
- Ciutadella abrirá a las visitas el túnel de la Guerra Civil que conecta la Catedral con la Plaça Nova
- Pez globo en Baleares: ¿Una amenaza real?
- Que ya no sea solo que los depósitos soterrados para el reciclaje...