Las fuerzas de la seguridad del Estado en su conjunto tienen más que una probada experiencia en su lucha contra el terrorismo, no en vano han estado como quien dice 50 años con el terrorismo de ETA, años de dolorosas experiencias, pero ese terrorismo era muy diferente del que llevan a cabo los fanatizados yihadistas y sus células durmientes que se activan sin otro razonamiento que el de causar el mayor daño posible, sabiendo que no van a conseguir otra cosa que ocasionar con sus sangrientas bestialidades que ser la trágica noticia a nivel mundial que les señala la sinrazón de su errática existencia, sin importarles para nada ni los daños ni los sufrimientos tan injustamente como indiscriminadamente causados. ETA no tenía en su fanatismo un componente religioso, todo acababa antes de autoinmolarse para ocasionar más víctimas, de manera, que no se colocaban un cinturón explosivo, más bien al contrario, tenían mucho interés en que ninguno de sus activistas resultase herido, y además, sus terrorista eran mayoritariamente vascos. Los yihadistas pueden ser de muy diferentes nacionalidades donde acabaremos por incluir la española. Los de Catalunya parece que eran mayoritariamente marroquíes. En cualquier caso suelen ser jóvenes radicalizados, como pasa con otras formaciones de índole sectaria por estos mundos tan escasos de sentido común.
Així mateix
La barbarie hacia la nada
15/09/17 19:30
También en Opinión
- Una inspección privada descubre otra gran roca a punto de caer desde el acantilado del puerto de Maó
- Joan Pons Torres cancela la conferencia ‘En defensa de Mahón’ el día después de su anuncio
- Antonio Gomila, la historia de éxito empresarial que se inició con un préstamo de 25.000 pesetas
- «La gente prefiere vivir a trabajar»
- El agua de Sa Caleta, Santandria y Cala Blanca está contaminada por nitratos y no es apta