Rafael, mi informático de cabecera me ha cogido confianza y se ríe abiertamente de mis progresos cuando me ve aparecer por su despacho, ordenador o impresora en mano, y con una desmadejada expresión de apuro.
-No, lo digo en serio: cada vez haces más cosa con las teclas -me dice-, y sé que se está quedando conmigo.
-Sí, acabo de pillar que arroba no se refiere a la unidad agraria de peso y que pestaña no solo a ese pelillo que a veces se tuerce hacia la córnea y me da trabajo…
Y es que eso del mundo cibernético me supera y, aunque intento adaptarme, me alarma. Todo esto de las bases de datos y algoritmos configura un futuro de lo más inquietante para la condición humana y el concepto cada vez más precario de libre albedrío. Lo apunta Eugeny Morozov en su libro «La locura del solucionismo tecnológico»(Katz editores): «Si no hallamos la fortaleza y el coraje para librarnos de la mentalidad de silicio que en la actualidad nos hace ir en busca de la perfección tecnológica, corremos el riesgo de encontrarnos con humanos que han perdido su capacidad básica de razonamiento moral; con instituciones culturales venidas a menos que no se arriesgan sino que cuidan su rentabilidad financiera; y lo que es más aterrador, con un entorno social hipercontrolado, que no solo haría del disenso algo imposible, sino que además es posible que lo convierta en algo inconcebible…»
En suma, que si la genética nos determina y los datos y algoritmos nos conducen, ¿qué queda de este pobre escribidor de abueleces? Rafael, en serio, no quiero progresar, pero no dejes de poner a punto mi ordenador…
SÁBADO, 29
Cuando acudo a tomar mi albariño sabatino los restauradores de Sa Pescateria se me quejan amargamente de su inminente cierre temporal por reformas que ellos preferían haber aplazado hasta el mes de noviembre (el corazón administrativo tiene razones que la razón no entiende), fuera de la temporada turística, lo que parecería más lógico. Mientras tanto, los parroquianos del aperitivo pescater sabatino tendremos que reubicarnos, aunque no creo que haya muchos problemas ya que, desde hace unos pocos años, en la zona florecen los locales como esclata-sangs…en noviembre.
DOMINGO, 30
Recién salida de la UCI tras los comicios franceses, Europa, sus instituciones, hace una demostración de fuerza y unidad al exigir al Reino Unido del brexit garantías para los residentes comunitarios den Gran Bretaña (el gran motor del voto antieuropeo) antes de encarar las futuras relaciones comerciales con la Unión Europea, ¡citizens first! Toda una declaración de intenciones, ética política y una inyección de moral para el anglófilo militante y europeísta convencido, en vías de visitar de nuevo la Pérfida Albión y saborear su glorioso steak and kidney pie, rito irrenunciable cada pocos años, salvo que allí también empiecen a llamarnos «polacos»…
En cuanto a política doméstica, no están tan claros los motivos de Pablo Iglesias con su moción de censura al gobierno Rajoy. O sí lo están, se trataría de poner en un brete al desorientado partido socialista en plena campaña de sus primarias. Si tanto hiere su sensibilidad ética el presidente Rajoy, Iglesias perdió una buena oportunidad de echarle cuando torpedeó-e impidió- un gobierno de coalición entre socialistas y Ciudadanos. De cualquier manera, y haciendo de la necesidad virtud, puede ser una buena ocasión para exigir explicaciones al huidizo presidente sobre la corrupción estructural de su partido, más allá de excusas de mal pagador y eslóganes de vuelo gallináceo («son cosas del pasado», «el que la hace la paga», etcétera).
LUNES, 1
Escribía Antonio Tudurí el pasado sábado en estas páginas que Sant Lluís ha hecho un excelente marketing de la figura de Albert Camus Sintes, quien, según sus investigaciones, tenía muchos más ancestros en otros pueblos de la Isla. Si es así, pues ¡bendito marketing!, porque las Trobades Literàries Mediterrànies Albert Camus han constituido un éxito cultural de primer orden y secundariamente, una más que excelente promoción de la Isla y que, por ambos motivos, deberían tener continuidad.
La mesa redonda que cierra hoy las Trobades, moderada por el imprescindible y siempre ponderado Iñaki Gabilondo, sobre «Luces mediterráneas» y en la que participa nuestro poeta Ponç Pons con una magnífica disertación sobre el universo camusiano, es un prodigio de calidad, poesía, grito solidario (¡ay! ese mare mortum) y esperanza que deja un poso estimulante en ese primero de mayo lleno de incertidumbres.
JUEVES, 4
Macron razona y argumenta como Hillary Clinton y tiene las encuestas a favor. Le Pen embiste como Trump… Oremus.
