12/03/17 0:00
Nadie hubiese imaginado, hace no tanto tiempo, lo que pasa hoy por normal y cotidiano. Y si las cosas se están acelerando de manera exponencial, ¿qué nos hace suponer que podemos adivinar lo que veremos dentro de veinte o treinta años? No todo lo incierto es negativo, por supuesto. Aunque siempre habrá de todo en la viña del Señor. Se habla mucho de la inteligencia artificial y de los robots. De la genética y los avances médicos. De la educación del futuro que abrirá puertas desconocidas hacia nuevas proezas humanas. También afrontaremos los retos y calamidades que nos acechan, sin sospecharlo siquiera, como siempre hemos hecho hasta ahora.