TW

Un problema será mayor o menor según el ángulo desde el que se mire. También dependerá de la vista que lo contempla ya que un pesimista probablemente sentirá como se hunde poco a poco su vida a causa de ese contratiempo mientras que el optimista buscará la manera más fácil de sortearlo y salir victorioso. Un nepalí, por su parte, sonreirá ante la adversidad y no perderá demasiado tiempo en ello. Es el Nepalí Style, según me dijeron.

Tras más de una semana deambulando por este maravilloso país corroboro un eslogan que lo acompaña: «La gente viene a Nepal por su naturaleza y regresa por su gente», o algo así. No le falta razón al comentario ya que en comparación con el resto de países del continente asiático que he visitado, éste es el más cálido y en el que te tratan mejor, más allá de verte como una cartera con piernas.

Lo que más me ha llamado la atención en su carácter es esa capacidad de afrontar las adversidades. Cada día hay cortes en el suministro eléctrico en este país, algo que a los occidentales nos parece ilógico pues ellos se lo toman con mucha filosofía. «Si no hay electricidad, pues ya volverá».

Noticias relacionadas

Esa misma mentalidad es la que tiñe su día a día. «¿Hace frío? Pues ya vendrá el calor», «¿Vamos con retraso? Pues llegaremos más tarde», «¿No hay leche? Pues tomaremos té»… No sé si sirve para que te hagas una idea pero seguramente a la mayoría de nosotros nos entraría una especie de pánico ante los mismos contratiempos. En el caso de la leche, bajaríamos a la tienda a comprar otro cartón, y en lo del retraso nos invadiría un sentimiento de culpabilidad propio de nuestra cultura. Aunque no a todo el mundo le sepa tan mal hacer esperar a alguien.

Ese Nepalí Style también les sirve para afrontar la tragedia de los tremendos terremotos que sacudieron el país en abril y en mayo y que se cobraron más de 4.500 vidas, además de destruir multitud de edificios. «Tenemos ladrillos y sabemos cómo constuir nuevos edificios, si lo hicimos una vez, lo volveremos a hacer», te dicen con una sonrisa sincera en el rostro, reconfortándote a ti, en lugar de ser tú el que los animes a ellos.

Es ahí, en plena lección vital, cuando te das cuenta de que cualquier adversidad se hace mayor solamente si tú se lo permites, que tenemos la posibilidad de relativizar todo aquello que nos pasa hasta el punto de minimizar las lamentaciones para no malgastar la vida en ello. ¿Quién se apunta al Nepalí Style?

dgelabertpetrus@gmail.co