Día importante en la agenda del dietarista de ínsulas baratarias. Presento una nueva novela en la magnífica Biblioteca Pública arropado por multitud de buenos amigos cuyo calor me acuna en un momento en que las mariposas zumban en mi estómago. Siento fluir en mis venas la corriente de afectos que he tratado de transmitir a mis personajes de ficción, así como el agradecimiento infinito a Editorial Menorca por el año maravilloso que me ha proporcionado primero por la celebración de mi cincuenta aniversario como articulista en su seno y, ahora, con la exquisita edición de mi novela y también a mi querido amiga, la escritora Mercedes Abad que, tal y como esperaba, nos descubre aspectos de la novela que el propio escribidor desconocía. Gracias, mil gracias a todos.
SÁBADO, 18
Los periódicos del día amanecen rebosantes de grandes caracteres por el nuevo escándalo de corrupción, perpetrado esta vez nada más y nada menos que por un ex vicepresidente del gobierno, casi venerado en su día como presunto muñidor del llamado «milagro económico» español, que al final resultó de cartón piedra. Lamentablemente para el partido en el gobierno no se trata de «un asunto particular» sino de una catarsis en toda regla para la derecha española, similar a la que hace unos meses provocó en el nacionalismo catalán Jordi Pujol con su confesión pública. Munición de grueso calibre, en fin, para los partidos emergentes. ¿Idus de abril para Montoro y Rajoy?
DOMINGO, 19
Un tropel de niños corretea por el jardín de casa. El boti boti crepita. Los globos multicolores ondean al viento. Una experta en artes escénicas (queda mucho mejor y es más certero que llamarla «payasa»), prepara su show. L'avi se escaquea un rato para ver retazos de un partido de la liga inglesa y echar una oblicua mirada a los periódicos del domingo. SM el niño, la niña en este caso, impone su jerarquía. Hoy día un cumpleaños infantil es como uno de los grandes ritos religiosos de antaño. Recuerdo sin melancolía los míos ya que apenas nadie se acordaba. La preeminencia de las onomásticas (en San Pedro, sí notaba algo), el hecho de darse en siete de enero, ahítos todos de fiestas y regalos (es un decir), y la frugalidad imperante en aquellos tiempos, todo ello hacía que el hoy mitificado cumple se despachara sumariamente a la hora de comer con un helado extra y una escueta declaración de buenos deseos (Qui fa els anys, avui?) acompañadas de pellizquitos y carantoñas.
Con todo el fárrago, solo al recogerme me doy cuenta de la magnitud de la nueva catástrofe humana en aguas del Mediterráneo. Escalofriante contraste con lo que acabo de vivir en el día de Inés. ¿Llegará Europa, sea lo que sea este ente a veces fantasmagórico, a tomar conciencia de la magnitud del problema y actuar en consecuencia?
LUNES, 20
Ayer, un pavoroso naufragio, hoy un lobo solitario irrumpe en un colegio de Barcelona y causa el pánico armado de cuchillo y ballesta. Además del presumible trastorno mental (la seguridad choca también con el ADN, como se vio en el caso del avión de Düsseldorf), se supone el resentimiento ya que, al parecer, el niño homicida tenía una lista de potenciales víctimas, personas que le habían mirado mal o que tenían esos ojos azules que siempre quiso tener. Y de paso hacerse famoso, el gran objetivo de las masas seducidas por el twiteo, ¡ser trending topic a los trece años!...
MARTES, 21
El caso del empresario peligrosamente armado con un casco que se auto infligió heridas de muerte chocando contra un hacha y un cuchillo de cocina que pasaban por allí portados por un ente incorpóreo, llena hoy, casi en vísperas de Sant Jordi, las páginas de «Es Diari» en un claro homenaje al género negro ( de ficción). Competencia seria para mi novela de intriga y misterio, aunque con víctimas reales, en este caso el empresario y sus hijas.
MIÉRCOLES, 22
Casa de citas. Antoni Puigverd en «La Vanguardia»: «Astracanada es el doble juego de la política que se presenta como honesta y moral para acabar mostrándose sucia y repelente. Astracanada es que el honorable Pujol confiese, de repente, un dinero escondido... Astracanada es que el principal partido español que, en tiempos de Aznar rentabilizó con tanto éxito el eslogan de 'paro, despilfarro y corrupción', acabe evidenciando que sus principales dirigentes, con Rato a la cabeza han batido los récords posibles del mangoneo y desfachatez. Astracanada es que el PSOE, sin limpiar sus establos en Andalucía, se permita el chiste de aparecer, gracias a un mero cambio de rostro, como el nuevo limpiador...»
JUEVES, 23
Antes de partir con Zaca para iniciar el maratón libresco en Ciutadella me encomiendo a los dioses para que me hagan recordar los nombres de los conocidos que se acerquen ( si es que se acercan) para la firma, y me otorguen el don de una mínima originalidad en la dedicatoria ( si es requerida).
A media mañana firmo un libro para un tal «Paco Lázaro» de Madrid....
