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Es noticia que Bruselas se ha abstenido de juzgar la memoria histórica del Este de Europa. Para aquellos que no lo sepan, lo que ha ocurrido es que seis países solicitaron a la Comisión Europea que equiparara la negación del Holocausto con la de los crímenes cometidos por los antiguos regímenes comunistas. El Ejecutivo comunitario "se ha quitado el marrón de encima" y ha decidido que sean los demás gobiernos quienes decidan qué atrocidades deben ser sancionables a escala comunitaria. Un dato curioso que yo no sabía: en algunos países europeos es delito negar el Holocausto... y me parece muy bien. Lo que liaron los nazis en su día no debe ser cuestionado ni olvidado, al igual que otros tantos crímenes contra la humanidad o de guerra que han sufrido grupos de personas por su raza, color, religión u origen, entre otros puntos. Entiendo que, con la que está cayendo en Europa, este tipo de cuestiones queden en un segundo plano, pero hay que pensar que, lo que para nosotros es memoria histórica, significa el pan de cada día en países africanos, donde las mujeres son víctimas de delitos sexuales; o en Oriente Medio, cuyo dantesco ambiente se nos muestra en cada 'telediario'. Indignante.