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Más de seis meses ha tardado la Demarcación de Costas en resolver algunas solicitudes para puntos de atraque o fondeo de "golondrinas" en distintas calas de la Isla. El permiso para un punto de atraque en Cala Galdana se comunicó el pasado lunes, 28 de junio, y estaba condicionado a una actuación en tierra que requiere de un proyecto técnico. Costas debe cumplir con su papel de vigilar el cumplimiento de la legislación de protección y uso del espacio público del litoral y las playas. Sin embargo, sería deseable una mayor sensibilidad para no poner obstáculos al desarrollo económico, incluso una actitud de reducir al máximo la burocracia en todos los trámites. La responsabilidad de la crisis no puede atribuirse exclusivamente a la administración pública, pero la dificultad y lentitud de los trámites burocráticos tiene una incidencia negativa en la actividad económica y eso sí deben resolverlo las instancias públicas. Costas no permite a las "golondrinas" acceder a las playas de La Vall. Ampliar las posibilidades de excursiones y la oferta de actividades en la costa es esencial para el sector turístico. Los empresarios se desaniman ante las trabas administrativas. Y al final, la economía insular sigue con "crecimiento negativo", decreciendo.