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Menorca viró ayer a la derecha. El candidato del Partido Popular, Adolfo Vilafranca, que relevará a Susana Mora en la presidencia del Consell, fue el más votado en los ocho municipios de la Isla y un pacto con Vox -que entra en la institución- le garantiza la mayoría absoluta para gobernar durante los próximos cuatro años. El PP de Misericordia Sugrañes y Marga Prohens, que ganaron ayer las elecciones en Menorca y las Balears, incrementa su responsabilidad institucional, al añadir las alcaldías de Ferreries y Es Castell, ambas conseguidas con mayoría absoluta, a las que venía desempeñando en Alaior y Es Migjorn, también revalidadas ayer con mayoría absoluta.

El PP tiene opciones de gobernar en Sant Lluís y lo que sucederá en el Ayuntamiento de Ciutadella constituye una incógnita, después de la desaparición de Unidas Podemos del Consell y que Més per Menorca haya perdido uno de sus tres consellers. El PSOE de Susana Mora sobrevive pero carece de apoyos para repetir el tripartito. Empieza un nuevo mandato con la orientación hacia la derecha que han marcado con claridad los menorquines en las urnas y que corresponderá aplicar y desarrollar al Partido Popular.