Veinte años después de la aprobación del Plan Territorial Insular y diez años después de la sentencia que condenó al Consell de Menorca a indemnizar con 28,8 millones de euros a la promotora Siteme -después, Cesgarden- el magistrado Gabriel Fiol, que presidió la Sala del Tribunal Superior autora de esta resolución judicial, valora para «Es Diari» este caso.
Tras su jubilación, Fiol Gomila afirma que «la defensa del caso Cesgarden por el Consell fue muy mala» y añade que «basaron su defensa en una causa de inadmisibilidad, en cuestiones formales». Pero la institución insular, que destinó miles de euros a pagar una defensa letrada fallida, se equivocó en su estrategia jurídica porque la Sala de lo Contencioso del TSJB entró en el fondo de la cuestión. Otra cuestión en la que falló el Consell consistió en no combatir con eficacia las periciales económicas de la promotora. Pero, «no dijeron ni pío», desvela Gabriel Fiol. Unas declaraciones que ponen de actualidad un caso que constituye un escándalo político porque ha tenido un coste de 28,8 millones para los menorquines. Los autores de este estropicio aún no han admitido su culpa ni han asumido responsabilidades.
