Las incógnitas sobre lo que sucederá en las próximas semanas con el turismo británico tienen en vilo al sector turístico menorquín. Nuestra dependencia económica de ese mercado incrementa la preocupación. Mientras el Gobierno de Reino Unido gestiona la crisis en función solo de sus intereses sanitarios y económicos, en España y en Balears la iniciativa propia es pobre.
Hoy, el epidemiólogo Maties Torrent, plantea una cuestión básica: Menorca está en mejor situación sanitaria que R.U., donde la cepa india acapara la mayoría de positivos, con una capacidad de contagiar un 40 % superior a la británica. La parte positiva es que las vacunas protegen contra la variante india y que R.U. tiene un nivel de inmunización más elevado. Hay que poner el foco en la seguridad sanitaria en las entradas de británicos y no en la cuarentena que realizarían a su regreso. Es necesario prever esos controles, que han de ser compatibles con la recuperación de la actividad turística. La crisis nos ha enseñado que seguridad sanitaria y economía van de la mano. Hemos de estar preparados si el 21 de junio el semáforo británico pasa a verde y a partir del 10 de julio ese mercado se activa para el bien de la economía y la salud.