La coincidencia, mañana en Ciutadella, de la nueva presidenta de Red Eléctrica de España, Beatriz Corredor; y la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, junto con la presidenta y el vicepresidente del Govern, Francina Armengol y Juan Pedro Yllanes respectivamente, para celebrar la entrada en servicio del cable eléctrico Mallorca-Menorca -el segundo que ahora es el primero- deben despejar varias dudas sobre el futuro energético de la Isla.
Entre otras cuestiones, cuáles son los recursos y el calendario del Estado y de Red Eléctrica, como operador del sistema, para avanzar hacia la descarbonización de Menorca. La hoja de ruta del Plan 2030 prevé para el 2025, que ya esté operativo el doble enlace eléctrico interinsular, con 100 MW, y que la central térmica de Maó funcione con gas natural. Dos cuestiones sobre las que este pasado jueves se pronunció la Comisión de Economía del Parlament al instar por unanimidad a la ministra Ribera y a la presidenta de Red Eléctrica el cumplimiento de estos objetivos. Consell y Govern deben exigir que no se produzcan demoras porque el segundo cable de Menorca no figura hoy entre las inversiones prioritarias de Red Eléctrica.
